Cuando Telde marca la agenda política

Lo que empezó como una información adelantada por TELDEACTUALIDAD sobre los movimientos para desbancar a Juan Antonio Peña de la Alcaldía ha terminado convirtiéndose en  el tema político más comentado en Telde y también con gran repercusión en el Archipiélago en los últimos días. Y eso, en un ecosistema informativo saturado y acostumbrado a correr de un titular a otro, no es casualidad: es la prueba de que cuando Telde estornuda, Canarias presta atención.

No todos los días una noticia de política municipal provoca tal sacudida mediática. Pero esta sí. Periódicos impresos, digitales, informativos y tertulias radiofónicas, noticiaros televisivos y hasta columnas de opinión de analistas acostumbrados a fijarse solo en la política autonómica han tenido que girar la mirada hacia Telde. Y es que la posibilidad —cierta o no— de una operación para mover el sillón de la Alcaldía ha hecho correr ríos de tinta como pocas veces en la historia política reciente del municipio.

La magnitud de la repercusión deja en evidencia algo que algunos partidos todavía se resisten a reconocer: la política de Telde importa, y mucho. Importa por su peso demográfico, por su rol territorial y por el complejo tablero de alianzas que se ha configurado en los últimos meses, especialmente en Gran Canaria tras la irrupción de Primero Canarias Pero importa, sobre todo, porque lo ocurrido aquí retrata dinámicas de poder que exceden lo local y se deslizan hacia estrategias insulares y autonómicas.

Nueva Canarias, Ciuca, Primero Canarias, PSOE, PP… todos han tenido que reaccionar, algunos con comunicados apresurados, otros escondiéndose tras silencios sospechosos y otros intentando aprovechar el caos para presentarse como garantes de estabilidad. Pero lo más revelador no es cómo actúan los partidos, sino cómo ha respondido el resto de la prensa: con una atención inusual que confirma que la tensión política teldense es hoy noticia de interés general.

Que un asunto local genere tal despliegue informativo dice dos cosas.
Primera: que las maniobras políticas en Telde no son un juego menor.

Segunda: que TELDEACTUALIDAD ha vuelto a demostrar por qué es referencia obligada para entender el pulso del municipio. Su adelanto informativo no solo activó a la ciudadanía: activó a toda la maquinaria mediática canaria, que durante días ha situado a Telde en el centro del relato político.

Mientras los partidos se enredan entre acusaciones, desmentidos y victimismos, la realidad es que el debate lo ha marcado la prensa, no los despachos. Han sido los titulares, los análisis, los editoriales y las tertulias los que han puesto orden en el caos, los que han obligado a reaccionar y los que han evidenciado las fracturas que la política teldense preferiría mantener en silencio.

Y ese es, quizás, el dato más relevante: cuando la información es rigurosa, verificada y oportuna, la agenda política se escribe desde el periodismo y no desde la política.

Telde lo ha vuelto a demostrar. Y los medios de comunicación de todo el Archipiélago lo han certificado sin matices.