TELDEACTUALIDAD
Telde.- La acumulación de hierbas secas y rastrojos en el patio trasero de la casona que en su día albergó el antiguo Centro de la Mujer de Telde ha sembrado el desasosiego entre los vecinos del barrio de San Juan. Los residentes de los edificios de las calles Doramas y Profesor Francisco Cruz temen que la aglomeración de masa vegetal pueda originar un incendio de graves consecuencias.
Los habitantes del casco de San Juan se encuentran preocupados por los rastrojos y restos arbóreos que se acumulan en el jardín de la centenaria casa canaria que hace años sirvió como sede para el antiguo Centro de la Mujer de Telde.
El inmueble, ubicado en la calle Doramos a la altura de la intersección con Profesor Francisco Cruz y cuya entrada principal da para la calle León y Castillo, cuenta con una terraza de 561 metros cuadrados que, denuncian, hace meses que no se limpia.
Un pequeño espacio al aire libre en el que conviven plantas, pequeños arbustos, un drago y varias palmeras de cuyas copas cuelgan hojas secas que ante las altas temperaturas de la época estival podrían prender con cualquier chispa.
Además, los vecinos subrayan que los inmuebles aledaños cuentan con balconadas y estructuras de madera que podrían verse afectados por el fuego e incrementar el peligro de un hipotético incendio.
Así las cosas, piden al Ayuntamiento de Telde que inste a los propietarios de la casona a limpiar el jardín y retirar los restos vegetales e incluso, subrayan, a contemplar una actuación de oficio ante el riesgo que esta situación supone.
En venta desde hace más de un año
Se da la circunstancia de que esta centenaria casa, ubicada en pleno casco de San Juan y a escasos metros de la plaza y de la Basílica, se encuentra a la venta desde hace algo más de un año por un precio de 1.053.000 euros.
Sus dueños la han ofrecido para albergar el Centro de Santa Rosalía, para el que la Consejería de Política Social del Cabildo de Gran Canaria busca ubicación dado su mal estado y el alto coste que conllevaría su adaptación.
En total cuenta con una superficie de 1.192 metros cuadrados, de los cuales 858 corresponden a las dos plantas construidas y el resto al jardín.
El agente Manuel Santana, de la inmobiliaria Remax Arco Iris, es el responsable de comercializar el inmueble.
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