"Es muy difícil creer que se nos fue Rubén"

Telde.- Lomo Cementerio despedirá este mediodía al joven Rubén Macías Ascanio, de 19 años, quien falleció este jueves en el Hospital Insular tras ingerir por error el veneno que se guardaba en una botella de refrescos. Macías residía en la calle de Simancas de este barrio teldense y estudió hasta cuarto de la ESO en el IES José Frugoni Pérez, tal y como adelantó TELDEACTUALIDAD. Sus restos mortales serán enterrados en el camposanto situado muy cerca de su casa después de una misa funeral en la Iglesia de Santiago Apóstol.

 

La noticia de su trágica muerte sobrecogió a los vecinos del núcleo poblacional donde nació y vivía con sus padres y abuelos. Muchos fueron los testimonios que lugareños y amigos de Rubén Macías Ascanio hicieron llegar a la redacción de TELDEACTUALIDAD en forma de comentario a la noticia en la que este periódico digital avanzaba la consternación y el dolor que su óbito había provocado en su lugar de residencia.

 

Así José Miguel Franco recordaba emocionado que “se nos fue un gran amigo, una persona maravillosa, un niño amable, cariñoso con sus padres, con sus abuelos, siempre tenía un te quiero para sus padres y su abuela”. Franco añadía que su muerte representa “una gran pérdida para su familia, solo les deseo que sean fuertes, y ahora mismo ninguna palabra les puede consolar. Es muy difícil creer que se nos fue Rubén”.

 

Una vecina de Lomo Cementerio, Yolanda, no ocultaba en sus palabras que “estamos muy afectados por la circunstancia de la muerte de Rubén”, mientras que María calificaba de “triste noticia” lo ocurrido. “Siempre te llevaremos en nuestros corazones, desde el cielo dale mucha fuerza a tu familia para que puedan ir saliendo adelante, un beso grande allá en donde estés”, concluía el mensaje conmovedor que hizo llegar a este diario electrónico.

 

Unos amigos de la familia y de Macías lo definían como un “chico noble y bueno”. Afirmaban que su muerte era una “lamentable pérdida” y daban “mucha fuerza” a sus progenitores, abuelos y hermana Raquel Macías, que estudia en el IES José Frugoni Pérez, para superar este difícil trance.

 

Los restos mortales de Rubén Macías eran velados desde ayer en un clima de gran dolor por familiares y amigos en la sala 1 del Tanatorio Municipal de Las Rubiesas, desde donde partirá este sábado la comitiva fúnebre a las 11.30 horas en dirección hacia la Iglesia de Santiago Apóstol, en Lomo Cementerio, donde se oficiará una misa funeral. Luego recibirá cristiana sepultura en el camposanto de San Gregorio, situado a escasos metros.

Como se había anunciado, el Instituto de Medicina Legal de Las Palmas realizó este viernes la autopsia al cuerpo de Macías para tratar de determinar las causas de óbito. El joven de Lomo Cementerio ingirió por error el pasado miércoles un pesticida que se guardaba en una botella o lata de refrescos y fue llevado al Hospital Insular, donde en el servicio de Urgencias se le hizo un lavado de estómago y se le dio el alta. Sin embargo, sus padres lo llevaron de nuevo al centro sanitario al proseguir con fuertes dolores estomacales y fiebre. Quedó ingresado y falleció al día siguiente al filo de las 11.00 horas. Sus padres han presentado una denuncia contra el médico que le atendió por presunta negligencia al entender que en vez de enviarle a su casa tuvo que dejarlo ingresado o en observación. La Justicia ha abierto una investigación.