Ojos de Garza les quita hasta el sueño

Telde.- Margarita Alonso, en huelga de hambre desde el 7 de julio para reclamar que AENA firme el convenio de realojo, no está sola, ni siquiera de noche. Un grupo de siete u ocho vecinos velan por sus sueños de madrugada en las instalaciones del Aeropuerto de Gran Canaria.

 

Hay personas que pasan la noche y se retiran a descansar por la mañana, pero luego hay otro grupo que opta por turnos de 24 horas alternos. Algunos ya muestran signos de cansancio, como María del Rosario Pérez, que tuvo que acudir al médico tras salir del aeródromo el pasado martes. Sin embargo, están convencidos que vale la pena el esfuerzo y el sacrificio porque la causa lo merece. Nada más y nada menos que pelear por sus casas.

 

Paco Silva es uno de los vecinos que suele estar todas las noches. Está jubilado y estos días ha consagrado su tiempo a la campaña iniciada por la portavoz de los afectados por la ampliación del aeropuerto, entre los que se encuentra él mismo, para exigir a AENA que deje de dar excusas y que firme “de una vez” el convenio con el que deberá comprometerse a financiar el realojo de las 1.000 casas que tendrán que derribarse para hacer la nueva pista.

 

Silva va y viene caminando desde Ojos de Garza, como casi todos. Dejar el coche en el aparcamiento implicaría dejarse el sueldo. “Al principio me quedé varias noches seguidas, pero me agotaba demasiado”. Tiene 57 años y no trabaja tras serle reconocida una invalidez. El problema es que, aunque se quiera, es muy difícil dormir en la terminal. Alonso lo consigue gracias a dos pastillas de Alprazolam, según Canarias 7.

 

Los vecinos intentan pasar la noche como pueden. Uno descansan en bancos y otros se han llevado mantas que ponen en el suelo para acostarse. Sin embargo, el trajín de las instalaciones no se lo pone fácil para descansar.

 

Emilio López, de 40 años, padece de apnea del sueño y no duda en traerse hasta Gando la máquina que le ayuda a dormir. “La enchufo en una columna, me coloco la mascarilla e intento descansar, pero nunca me tranco, porque me da respeto que le pase algo a Margarita”. Actualmente está en paro y por eso puede permitirse quedarse con Alonso. Los intentos de dar una cabezadita comienzan a las tres de la madrugada, momento en que dejan de llegar vuelos.

 

Hasta esa hora cada uno mata el tiempo como puede. A ratos hablan, leen o se echan un cafecito. Se trata de ganar la partida a AENA y este turno de la noche, al menos, ha vencido al cansancio.

 

Fernando Padilla, de 63 años, reconoce que apenas da cabezadas durante la madrugada. Es el marido de María del Rosario y dice que se ha quedado todas las noches. No le cansa tanto quedarse por la noche como los años que lleva peleando.

 

Ni Margarita Alonso, que ayer pasó un día tranquilo, sin sobresaltos hospitalarios, ni el equipo del turno de noche. Nadie tiene noticia clara ni cierta de lo que está haciendo AENA. Lo único que les llegó ayer fueron las palabras del ministro de Industria, José Manuel Soria, en declaraciones al programa Hoy por Hoy de la Cadena Ser. El alto cargo canario recordó que el viernes pasado se pasó a saludar a Margarita en el aeropuerto y que le dijo que estaba trabajando “conjuntamente con el Ministerio de Fomento para arreglar las cosas”.

 

Y no dijo cuándo, pero mostró su confianza en que se arreglarán “pronto”. “Sería muy razonable una solución, lo que pasa es que a veces las cosas no ocurren de la noche a la mañana”, advirtió.

 

Por si acaso, por si se les olvida quiénes son los que tienen la llave del problema, los vecinos de Ojos de Garza pusieron ayer un nuevo atrezo al set de la protesta que tienen montado en Gando. La silla donde suele sentarse Margarita está flanqueada por dos retratos, uno de Soria, y otro de la ministra de Fomento, Ana Pastor.

 

Luego hay políticos en cuyas manos no está la solución, pero de los que no hay que colocar foto porque hasta se quedan a dormir, como la edil de NC, Fefi Milán, o se pasan horas acompañando, como la consejera insular del PSOE Isabel Guerra.