Disculpe usted, señor MenaÂ…

Ruego me disculpe, por tratarle de señor, pues creo que debería dirigirme a usted como Excelencia, dada la excelsa labor que ha hecho hasta ahora por el municipio de Telde, conocida también como Ciudad de los Faycanes, pero dada su sencillez y discreción al mismo tiempo, estoy segura que si le diera ese trato , se molestaría y nada más lejos de mi intención hacerlo, que ya bastante tiene con lo que está pasando, tan buena persona como es, pero claro, siempre se ceban con los mejores, como usted, mismamente hablando.

 

Tal como dije más arriba, además de esa sencillez y discreción tan características suyas, son muchas más las cualidades positivas que posee, que si se buscara en el diccionario el significado de alguna de ellas, aparecería su cara directamente, pues muchas son inherentes a su persona y al trato que le daba a las personas con las que trataba, al menos cumpliendo sus funciones en los sucesivos cargos de responsabilidad que ha tenido a lo largo de su dilatada carrera, en tiempo, como funcionario, sobre todo en esa Super Concejalía de Urbanismo del Ayuntamiento de Telde, que si no llega a ser por su admirable y encomiable gestión, no sé a dónde iría a parar, la pobrecilla; menos mal que estaba usted ahí para enmendar los errores que cometían los demás, señor Mena, algo digno de agradecer en todo momento.

 

Muchos de esos errores, claro está que los cometía el funcionariado abusando de su confianza, pues hacía y deshacía a su antojo lo que más le convenía; qué poca vergüenza por parte de estos funcionarios y funcionarias, tan bien pagados y mimados por la administración…si es que la gente no está por agradecer nada, ni respetar su puesto de trabajo en una Institución tan noble como es el Ayuntamiento, la primera Administración a la que debe acudir la ciudadanía , pues es la más próxima que tiene y donde se supone que se debería tratar y atender como realmente se lo merece, con respeto y consideración, lo mismo que hacía usted con ese personal tan inepto asustadizo, no sé por qué, y los usuarios y usuarias que acudían en busca de esa información que tanto necesitaban y a la cual tenían derecho; menos mal que ahí estaba usted, al pie del cañón siempre, en todo momento.

 

Recuerdo el trato que me daba a mí, particularmente, cuando en varias ocasiones, tenía que recurrir a esa “superconcejalía” para ver si alguien se compadecía de mí y me trataba como me merecía, pues sólo iba a reivindicar mis derechos, y usted no hacía más que poner en marcha a sus ineptos subordinados y subordinadas para que cuando saliera de allí , me fuera de lo más contenta, tanto es así que una noche tuve un sueño en el cual usted me decía, “que si esto iba a seguir así, coño”, palabras textuales, y que las escribo, aunque sean algo mal sonantes, porque fue eso precisamente lo que me dijo, en sueños, claro, pues nunca se hubiera atrevido a decírmelo a la cara y menos en presencia de alguien, como pasó en el sueño; no me cabe la menor duda de que no lo habría hecho, pues pensaría muy mal de usted si así fuera; fíjese si me sentí culpable que hasta a punto estuve de pedirle disculpas por haber soñado eso , pero no quería molestarle más, que ya bastante tenía.

 

Ahora está inculpado en muchas causas, ¡lástima! , casi todas motivadas por la envidia de las personas que , con tal de verle hundido , hacen lo imposible para echarle abajo todo el trabajo y todo el bien que ha hecho por la ciudadanía teldense; lo que más me tranquiliza de todo esto es que , como usted es letrado, sacará todas las armas que tiene a su alcance para defenderse con uñas y dientes y, ese honor que ha sido mancillado por muchos, se le restituirá hasta el punto de que algunos y algunas tendrán que pedirle perdón por ese dolor que le ha causado y las interminables preocupaciones que ha tenido, sólo por ser bueno, sólo por eso, pues no veo otro motivo, por más que me esfuerce en hacerlo.

  

Cuando veo las fotos que aparecen en los diferentes medios de comunicación hablando de una manera muy amena y distendida con uno de los que también está imputados, injustamente, claro está, al igual que usted , en el denominado Caso Europa, pienso en el verdadero sentido de la amistad, pues hasta en esos momentos tan críticos por los que atraviesan permanecen tan unidos y siempre con una sonrisa en la boca, ya que ,en el fondo saben que no han hecho nada; en su defensa, en la de él, diré que era el único que no se reía de mí cuando iba a reivindicar esos derechos que usted tanto conocía y por los que tanto luchó para que se me reconocieran, y fíjese ahora, en el banquillo de los acusados los dos…cuánta fidelidad y lealtad al mismo tiempo por parte de ambos.

 

Para terminar, sólo me queda decirle, señor Mena , que haré lo imposible para que , cuando ese tan merecido honor se le restituya , se dedique a la política, pues en Telde, el único que hace falta es usted para que funcione todo bien en el ayuntamiento de la ciudad de los Faycanes , sobre todo en el tema económico, que sabe mucho de cuentas y muy bien podrían designarle como Director de Gobierno de Hacienda; ahí sí que estaría a sus anchas y en su terreno. No se preocupe si ningún partido intenta convencerle para encabezar su cabeza de lista; preséntese como independiente, que siempre le ha venido muy bien actuar así, y haga algo por este municipio; la ciudadanía entera en general y yo en particular se lo agradeceremos eternamente.

 

Disculpe usted, señor Mena, si le he ofendido, pero siempre digo lo que pienso y siento y creo que estas palabras debería habérselas dedicado hace mucho tiempo ya; le envío saludos porque no me creo merecedora de un abrazo por su parte y le deseo toda la suerte del mundo, soy tan considerada que aprovecharé esta Semana Santa para meditar y rezar por usted, que tanto se lo merece, con el fin de que la vida le devuelva lo que es suyo, realmente, de corazón se lo deseo, señor Mena , y disculpe usted.