Un memorial para comprender el legado del maestro Arencibia Gil

TELDEACTUALIDAD

Telde.- La Casa-Museo León y Castillo de Telde inauguró el pasado martes la exposición El dibujo en la obra de José Arencibia Gil. Una muestra compuesta por medio centenar de obras que trata de acercar al público la faceta de dibujante de este destacado y desaparecido artista grancanario, considerado hijo legítimo de la ciudad de Telde.

Una exposición para entender mejor la biografía y obra del maestro José Arencibia Gil

por Jesús Ruiz

Un entrañable memorial dedicado a la figura del pintor José Arencibia Gil en la Exposición que conmemora su centenario. Nace en Las Palmas de Gran Canaria 1914, y a los tres años viene a Telde con su familia. Fallecería en Telde, en 1968. La muestra inaugurada el martes 8 de julio en la Casa Museo León y Castillo de Telde, expone en un amplio recorrido la biografía y obra pictórica de quién marcó uno de las épocas culturales más importantes del desarrollo cultural de Telde y Gran Canaria, gracias a la visión artística del maestro José Arencibia Gil, que después de una vida dedicada al arte, extendida su obra por toda la geografía grancanaria, nos dejó aún joven, pero con un legado que en esta exposición podemos repasar, reconocer y valorar en, prácticamente, todo su conjunto.

El director conservador de la Institución Museística teldense D. Antonio María González Padrón en el momento de la inauguración expone la historia y desarrollo de la Casa Museo, por la biografía y obra de José Arencibia Gil: “Bienvenidos a la exposición que hoy inauguramos en esta Casa Museo de León y Castillo, institución que nace en 1954, por una idea de tres personas de ideologías bien diferentes: una era, D. Matías Vega Guerra que, si durante la República había militado en la derecha canaria, como abogado muy pronto se unió al régimen; después su amigo y colaborador Néstor Álamo de una familia de vieja tradición carlista del norte de Gran Canaria, de Santa María de Guía; y un amigo y colaborador muy íntimo, que había sido represaliado, había estado unos años en el penal campo de concentración de Gando, militante activo del Partido Socialista Obrero Español, que fue Santiago Santana.

Por lo tanto se unen las dos Españas, otra vez en el Cabildo de Gran Canaria con la idea de crear una red de Museos. El primero había sido la Casa de Colón en Las Palmas y, cuatro años más tarde, se plantean hacer dos Museos más en Gran Canaria: uno dedicado a Fernando de León y Castillo, líder indiscutible de los liberales grancanarios durante el siglo XIX y principios del XX, y por otro lado la Casa de Galdós. Pero, por donde no habían pensado que el obispo de la Diócesis, Antonio Pildain Zapiaín prohibiría tácitamente bajo peligro de excomunión, a todo aquel que hiciera algo a favor de la casa de Benito Pérez Galdós, al que titula hijo espumero de la iglesia católica. En cambio eso que para D. Benito fue malo, para D. Fernando fue bueno porque se invirtió el poco dinero que había en crear esta casa.

Esta casa se crea gracias al esfuerzo de estas tres personas, pero también porque José Arencibia Gil se da de alta en el gremio de maestros de la construcción, en el sindicato vertical existente en aquellos momentos y le dan la oba de rehabilitación de la casa natal de Fernando de León y Castillo. Quien hizo la transformación o puesta al día, la dotación de una casa familiar, muchas veces transformada en Casa Museo, fue José Arencibia Gil en el año 1954.

La Casa se inaugura, como todo, en aquel entonces un 18 de julio, se vuelve a cerrar y abre sus puertas el día 4 de octubre, día de San francisco pero festividad del Caudillo, todo estaba bien reglado. Cuando la Casa Museo se convierte en Biblioteca Pública de la comarca sur de la isla, no había un solo libro de Telde hasta Mogán, aquí había una biblioteca con 3.000 volúmenes en su mejor época que era lo que podían consultar los alumnos del que más tarde sería el primer instituto también, no en Las Palmas, el Instituto Laboral de Telde, donde fue profesor de dibujo José Arencibia Gil. También hemos hecho varias exposiciones de, también, Víctor el nieto, y de otras personas en La Fraternidad, en El Casino.

Hemos hecho exposiciones de José Arencibia Gil porque le hemos seguido en las fiestas patronales de San Gregorio, de San Juan, en las de San Francisco, en la Casa de la cultura hoy Teatro Juan Ramón Jiménez. Recordamos una magna exposición que hizo Víctor en la iglesia hospitalaria de San Pedro Mártir de Verona, y después que los teldenses decir Pepe Arencibia es recordarlo en cada esquina.

San Francisco si se mantiene, y se mantenía mejor en vida de José Arencibia, ahora con ciertas aberraciones estéticas que él no hubiese permitido, fue custodio de este barrio durante mucho tiempo y pasando por la calle Pérez Galdós, una de las más importantes de la ciudad tenemos los altorrelieves que hizo sobre la industria y el trabajo artesanal y campesino en la fachada del Instituto Laboral.

En Telde muestras artísticas de su trabajo, en la Plaza de doña Rafaela Manrique, en San Gregorio el único Kiosko de la música de la ciudad, en el parque Franchy Roca todo este parque reformado por él. En todos los barrios de Telde diseñó los llamados pilares de agua para el abastecimiento público de miles de familias. La iglesia de San Isidro Labrador en el barrio de La Pardilla, la iglesia de la Virgen de Fátima en El Calero, la iglesia de San Pedro y la Virgen del Carmen en Ejido, la iglesia del Santo Cura de Ars en Las Clavellinas, arregló estanques, construyó y mejoró acequias hizo muchísimas cosas, por eso esta ciudad arqueológicamente se puede estudiar por el trabajo de José Arencibia Gil.

Hay una faceta que se le criticaba en gran manera, como que era excesivamente academicista, se agarra mucho a los estudios que tenía de la Real Academia de San Fernando que otros no tenían, y entonces se une mucho al dibujo, no es libre a la hora de componer sus cuadros y eso le prestaba frescura, sus cuadros hechos para la familia, amigos, etc lo hace con mayor libertad, emplea más colores, se suelta, emplea la paleta y a veces hasta los dedos, la huella del mismo en uno de sus cuadros, esto le decían que era excesivamente academicista porque se ha pegado al dibujo, y queremos demostrar con esta exposición, si estudiando bien el dibujo de José Arencibia Gil que era básico para él, no lo era o lo fue siempre y si el dibujo siempre fue el mismo.

Pero de José Arencibia hemos descubierto que había dibujo para casi todo. Hay una primera parte donde utiliza el dibujo para hacer caricaturas, donde muestra no solo los perfiles sino los rasgos psicológicos de la personalidad, tal como eran y lo expresa el dibujante. Se pueden observar personalidades teldenses famosos por sus diferentes actividades culturales, sociales, profesionales, médicos, escritores, etc. Trabajos en dibujo dedicados a su esposa, el amor de su vida, como siempre hemos querido recordarle, con el permiso de sus hijos, dedicados a Rosita. Hay una preciosa carta de José Arencibia, escrita después de la guerra. Tenemos también otra carta donde las promesas son más que promesas en una preciosa declaración de amor por encima de todo.

Sus amigos del Instituto en una especie de retiro que hizo en Agaete para preparar al primer grupo de profesores que iba a empezar a dar clases en el Instituto Laboral, la mayoría eran catedráticos de la península. Hay una parte que gracias a la intervención de Pildaín cuando la economía fue mejor, la parte oficial, obras que se diseñaron y no se hicieron jamás, en una obra de conocimiento extraordinario como la iglesia de La Luz en Las Palmas. Una obra en bronce la del Altar Mayor de San Agustín que la termina su hijo, otra en Santa Lucía de Tirajana.

El fresco para la iglesia de San Pedro y la Virgen del Carmen de El Ejido donde en unos minuciosos apuntes detalla al margen del boceto lo que expresa en su obra, porqué y cómo coloca cada uno de los elementos, San Simón Stock, que llevaba cuarenta años de ermitaño en el Monte Carmelo en Israel, viviendo en el tronco de un árbol, se le presenta la Virgen le regala una casulla y se funda la orden de los carmelitas, la orden más antigua de la Iglesia católica. Jesús en el mar de Galilea cuando le dice a Pedro que va ser pescador de hombres.

Casi finalizando su vida va expresando un concepto más moderno del diseño, por ejemplo, para la iglesia de Santa Teresita en Las Palmas de Gran Canaria. Otros dibujos y diseños para la Capilla de la Residencia Hospital Nuestra Señora del Pino, otros para el Seminario. Después del Concilio Vaticano II en 1963, se le pide la creación de mesas de altares dado que el celebrante oficia la liturgia frente a los fieles. Desde la Basílica de San Juan, a la iglesia de Nuestra Señora del Pino, por la Catedral. Esta es una parte de reproducción de muchas de las piezas que iban encontrando.

El cuadro memorial de su último trabajo como pintor creador la tarde que falleció, el paisaje del Roque Nublo, pintado a base de paleta más que de pincel, trazos gruesos, es el momento en que se sentía más creativo, se nota un cambio artístico tremendo en él después de la obra realizada por los años 1967-1968. Una obra importante, conocida por los estudiosos de Arencibia, pero desconocida por el gran público es el diseño de muebles para despachos de médicos, abogados, notarios, de todo tipo. Hay diseños de dormitorios de la época en su conjunto. Contaba con carpinteros tanto en Vegueta, como en Teror, y en Telde, manteniendo los diseños de José Arencibia y su contacto directo con el carpintero a quien informa de los efectos de profundidad, luz y estilo diseñados por él mismo en la importancia del resultado final. El cronista Oficial de Artenara D. José Antonio Luján Hernández comenta que los grandes pintores y escultores de Canarias diseñaban muebles para las familias y como desarrollo industrial artístico.

Se expone una sección documental en este centenario y exposición, que ha sido posible al cumplirse los cien años de José Arencibia Gil, gracias a la generosidad extrema de su familia, concretamente de su mujer y de sus hijos. Esta Casa Museo tiene más de 200 dibujos individualizados, pero más de 500 obras de José Arencibia entre pinturas, acuarelas, dibujos, detalles en diseños, proyectos, documentos, etc. José Arencibia Gil fallece en 1968, sus restos descansan revestido del hábito franciscano en el cementerio de San Juan de Telde.

Esta Exposición ha sido comisariada por Juan Ismael Santana Ramírez, bibliotecario, que durante más de tres meses ha elaborado gracias a la documentación, obras de arte, biografía, etc, para realizar en un exhaustivo trabajo los paneles informativos, documentación y estructura de la exposición.

Presente en el acto su hijo, D. Jose Arencibia Betancort interviene en el acto: “Saludo a todos los presentes y agradecer a D. Antonio María González Padrón, que ha estudiado, difundido y disfrutado la obra de mi padre, con una plena dedicación y es de agradecer en nombre de toda la familia, el empeño puesto en este magnífico trabajo, y como teldense, no solo con respecto a mi padre sino a la cultura e historia de Telde. Tengo muchas anécdotas y vivencias de mi padre en Telde, aunque yo tenía 16 años cuando murió.

Tengo un gran recuerdo de su sentido del humor, muy grande, humor socarrón, con respecto a sus exigencias en la enseñanza del dibujo en mi persona cuando fui alumno del Instituto Laboral y otras aficiones musicales mías. Con un gran amor a su tierra, a sus cumbres, a Artenara de quién tenemos aquí al cronista de Artenara que puede ser testigo de ese amor por las cumbres. Escribió poemas algunos de nostalgia que le surgió estando confinado en Valencia.

Hizo una poesía dedicada a la cumbre, desde su visión, que tituló, Desde mi ventana: Violeta y azul confusos/ cortina gris de tu neblina,/ cumbre canaria, de contornos difusos/ de mi espíritu cima./ Quietud del aire vigilante/ prendido en estáticas palmeras,/ en el silencio de la tarde amante/ mirándote desde la mar, ribera./ Esquivas tu amor de sierra/ porque sueñas muy alto, en los luceros,/ alta y honda, cielo y tierra/ quiero verte cumbre, espero./ Cuna gigante, amor te siento/ enclaustrada en tu niebla solitaria,/ huye feliz, en tu aislamiento/ mi sentimiento eres tú, esta plegaria./ Muchas gracias.”

González Padrón interviene de nuevo: “Esta es la faceta de José Arencibia Gil, la de dibujante, pintor, escritor de poemas. Decirles que a partir del día 14, esta exposición o gran parte de ella viajará hasta el centro de Gran Canaria, para observar la Tempestad Petrificada de Unamuno; se va a Artenara donde estará unos quince o veinte días. En el mes de octubre estará en Santa Lucía de Tirajana, después irá a Ingenio, Agüimes esperando cubrir varios puntos de Gran Canaria, que empieza en Telde y que terminará el próximo mes de mayo del 2015 en Telde de nuevo.

Recorrerá todos los lugares que se pida y que reúna las condiciones adecuadas, pero también a todos aquellos que están vinculados con la obra de José Arencibia Gil. El día de mañana miércoles 9, la pintora de origen filipino Da. Isabel Echevarria hace donación de dos cuadros suyos de José Martí, el padre de la patria cubana y José Rizal poeta, escritor, padre de la patria filipina, dos personas que se relacionaron con D. Fernando León y Castillo, aunque pensaron diferente, queremos que estén aquí a traes del tiempo. Disfruten todos de la exposición y muchas gracias”.

El acto de inauguración e intervenciones finaliza con la foto de la familia Arencibia y el recorrido por la galería donde se puede apreciar el extraordinario trabajo en paneles sobre la biografía y obra del artista teldense José Arencibia Gil, elaborado por el técnico medio de museos, bibliotecario, licenciado en Historia, de la Casa Museo León y Castillo de Telde, D. Juan Ismael Santana Ramírez.

Realmente una exposición para conocer, entender y traer a la memoria colectiva de los canarios la personalidad y obra de un artista que dejó su obra como legado artístico, urbano, importante huella para los teldenses, que tuvimos la suerte de conocer y compartir sus enseñanzas en el Instituto Laboral de Telde. Hablar de José Arencibia Gil es pensar en Telde, hablar y recorrer Telde y Gran Canaria a través de su obra, proyectos, dibujos, diseños, estudios, unos resueltos decididamente, otros por resolver; pero, su imaginación, su espíritu creador, su personalidad de un grancanario que amó su tierra, impregnó de su carácter e interés por la cultura y la conservación de las buenas obras creadas por el artista a toda una sociedad que hoy le recordamos en este centenario, desde la Casa Museo León y Castillo de Telde.

Enhorabuena a la familia de don José Arencibia Gil, y a la iniciativa de la dirección de la institución museística teldense por esta gran Exposición biográfica y artística de la obra del siempre recordado artista teldense. Muchas gracias.

Jesús Ruiz Mesa es colaborador cultural de TELDEACTUALIDAD.