Un boquete en un muro histórico inquieta a los vecinos de San Francisco

Vecinos del barrio histórico de San Francisco, en Telde, han vuelto a dar la voz de alarma por el estado de un viejo muro situado en la calle San Francisco, esquina con Inés Chimida, donde se ha abierto un boquete de grandes dimensiones que deja al descubierto el interior del terreno colindante. La situación, según denuncian residentes de la zona, supone un riesgo evidente tanto para las viviendas cercanas como para los viandantes.

Según fuentes vecinales consultadas por este medio, el interior del muro presenta un descalce de aproximadamente cuatro metros cuadrados, con pérdida de material y grietas visibles que se extienden hacia ambas calles. El boquete permite ver el arbolado del interior de la finca, evidenciando el deterioro estructural del cerramiento, que forma parte del entorno del conjunto histórico.

Los vecinos señalan como uno de los factores principales la presión ejercida por las raíces y el tronco de un ciprés de gran porte, ubicado en el interior de la propiedad. Recuerdan que técnicos del Cabildo de Gran Canaria ya advirtieron hace cinco años del peligro existente por la proximidad del árbol a los muros y a las casas colindantes, alertando de una posible caída o colapso si no se actuaba de forma preventiva.

La situación se ha visto agravada en las últimas semanas por las lluvias y los episodios de viento, que han acelerado el deterioro del muro. Los residentes lamentan que, pese a las advertencias reiteradas, ni la Parroquia de San Juan —propietaria de la finca— ni el Obispado ni el Ayuntamiento de Telde hayan adoptado medidas para corregir el problema. “El riesgo está ahí desde hace años y ahora es aún más evidente”, señalan, reclamando una intervención urgente antes de que se produzcan daños personales o materiales.