
El entrenador del Baloncesto Telde, Tony Esparragón, valoró este lunes la derrota de su equipo ante el CD Mensajero, marcada por un parcial encajado entre el final del segundo cuarto y el inicio del tercero de 0-23 que, a su juicio, “resultó determinante” para el desenlace del encuentro.
“En el tercer cuarto y el final del segundo… de los primeros 18 minutos estuvimos haciendo un trabajo muy bueno”, afirmó, destacando que durante esa fase el equipo leyó bien las ventajas en ataque y cumplió con el plan defensivo previsto.
El técnico reconoció que los últimos dos minutos antes del descanso y los primeros instantes del tercer periodo afectaron de forma directa al rendimiento. “Nos metieron un parcial 0-23 entre una cosa y otra, que nos lastró muchísimo; nos hizo incluso bajar la cabeza por primera vez en la temporada”, señaló.
Añadió que el equipo intentó volver a entrar en el partido, pero la reacción resultó insuficiente ante un rival al que definió como un conjunto veterano que sabe administrar rentas.
Respecto al impacto psicológico de dos acciones concretas —un tapón y un triple validados en los segundos finales de la primera parte— Esparragón admitió que influyeron en el ánimo del equipo, aunque no deberían condicionar su rendimiento. “Creo que sí nos afectó… pero es preocupante porque a la vuelta del descanso estuvimos casi cinco minutos sin meter canasta; las cabezas no estaban en el mismo sitio”, explicó. En su opinión, estas situaciones ayudan a detectar aspectos que el grupo debe mejorar para mantener 40 minutos de competitividad.
Preguntado por si fue el peor encuentro de la temporada, el entrenador lo descartó. “La primera parte puede ser de las mejores; la segunda, de las peores”, apuntó, recalcando que el desarrollo del partido respondió a circunstancias propias del juego. Recordó además que la clasificación sigue muy ajustada y que la derrota coincidió con victorias de equipos situados en la parte baja, lo que comprime aún más la tabla.
Esparragón también valoró el estado anímico del vestuario tras el encuentro. “Los vi entristecidos, pero eso es bueno; eso es que estamos compitiendo y que queremos ganar siempre”, declaró. Indicó además que los jugadores retomaron el trabajo semanal con normalidad y buena actitud en el primer entrenamiento posterior a la derrota.
Sobre los aspectos a mejorar, el técnico reconoció que el porcentaje de acierto exterior ha descendido en los dos últimos partidos. “Llevamos dos partidos que no estamos acertando de fuera. Llegará un punto en que, si no hemos metido poco este partido y el anterior, el que viene igual metemos quince”, comentó, recordando que el equipo cuenta con buenos tiradores. También señaló desajustes defensivos en la segunda parte y la dificultad para imponer el ritmo propio ante un Mensajero que buscó un juego más pausado.
Cuestionado sobre el momento en el que percibió que la remontada era improbable, el entrenador explicó que nunca se da por imposible, pero reconoció la dificultad. “Cuando se nos rompió el partido en el tercer cuarto, quizá. [El Mensajero] Es un equipo veterano que sabe llevar los tempos”, indicó. Asimismo, descartó que el arbitraje influyera en el resultado: “Creo que incluso te diría que lo hicieron bien; hicieron un buen trabajo”.
El Baloncesto Telde ya prepara su próximo compromiso frente al líder Tres Cantos. Esparragón anunció que el enfoque semanal combina recuperación física y trabajo específico de tiro, manteniendo el plan habitual de entrenamientos. “Sabemos lo que hay, pero también sabemos que somos capaces de competirle a todo el mundo”, señaló. El equipo viajará el domingo y dispondrá de pista viernes y sábado para sesiones voluntarias.










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