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Martes, 11 de Noviembre de 2025

Actualizada Martes, 11 de Noviembre de 2025 a las 12:55:12 horas

Se celebraron del 6 al 9 de este mes

Amara Florido:: "Turismo y patrimonio industrial de Telde. Un binomio pendiente"

La doctora en Historia del Arte participó en las jornadas celebradas en la Casa Condal

TELDEACTUALIDAD / JESÚS RUIZ MESA Martes, 11 de Noviembre de 2025 Tiempo de lectura: Actualizada Martes, 11 de Noviembre de 2025 a las 07:28:26 horas

Las Jornadas de Turismo y Patrimonio Ciudad de Telde 2025, celebradas en la Casa Condal, concluyeron este fin de semana tras varios días de ponencias, mesas de debate y visitas guiadas centradas en la relación entre el turismo sostenible y la preservación del patrimonio histórico y cultural del municipio.

 

Organizadas por la Concejalía de Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Telde y dirigidas por el historiador y arqueólogo Abel Galindo, las jornadas contaron con la participación de investigadores, docentes y especialistas en gestión patrimonial, que coincidieron en destacar la necesidad de integrar el patrimonio como eje de desarrollo local.

 

Entre las intervenciones, la doctora en Historia del Arte Amara Florido Castro presentó la ponencia “Turismo y Patrimonio Industrial de Telde. Un binomio pendiente”, en la que abordó la posibilidad de consolidar un turismo industrial y cultural en torno a espacios como la Azucarera de San Juan, el Molino del Conde, la Noria de Jinámar o el antiguo matadero de San José de Las Longueras. Los participantes subrayaron la importancia de proteger, documentar y poner en valor estos enclaves, tanto por su valor histórico como por su potencial educativo y turístico.

 

El encuentro contó con la colaboración del Círculo Cultural de Telde, la Casa-Museo León y Castillo y otras entidades locales, y forma parte de las iniciativas impulsadas por el Ayuntamiento para vincular el patrimonio con la promoción turística y la participación ciudadana.

 

Ponencia de la doctora Amara Florido Castroo 

Crónica de Jesús Ruiz Mesa, colaborador cultural de TELDEACTUALIDAD

Jornadas organizadas por la Concejalía de Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Telde que desde el jueves 6 de noviembre hasta el domingo 9, dirigidas por el historiador y arqueólogo Abel Galindo, se imparten, en el proyecto de reforzar la apuesta de Telde por un turismo sostenible hacia un mejor y amplio conocimiento de la ciudadanía y gestión cultural para el municipio teldense.

 

Excelente programa tanto documental como informativo de llamar a las conciencias ciudadanas, institucionales por retomar el legado histórico patrimonial en todas sus vertientes y respetar las huellas de un pasado que nos ayudarán a entender el presente y preservarlas para conocimiento de las generaciones futuras. 

 

Seminario que se desarrolla en la Casa Condal del casco histórico fundacional de la ciudad de Telde cuyas ponencias, talleres, debates, visitas guiadas, impartidos por expertos, historiadores, investigadores, personas autorizadas y documentadas por sus investigaciones y constante batallar por dar a conocer lo que por el tiempo, la cotidianeidad, desconocimiento y quizás por la importancia y prioridad de otros asuntos hoy se hace necesaria la reflexión ante el rico patrimonio histórico de Telde y en esta ocasión coordinar, crear espacios de encuentros con las instituciones, para incentivar los ámbitos de continuidad en las investigaciones, gestión patrimonial y difusión cultural del patrimonio que nuestros antepasados legaron para su custodia y mirada a lo que hoy somos porque ellos, en toda la diversidad patrimonial lo vivieron.   

 

Expertos, académicos, profesores, doctores, conocedores del entorno patrimonial histórico y patrimonial han puesto de relieve el gran patrimonio con miradas hacia el turismo, presentando proyectos culturales, sociales, económicos, de conservación y difusión de una herencia digna de respetar recibía de nuestros antepasados y de un contexto no tan lejano que muchos de los asistentes a las Jornadas han sido testigos de su evolución. 

 

La ponencia correspondiente en la tarde del viernes 7 presentada por Abel Galindo e impartida por la doctora en Historia del Arte, Amara Florido Castro, Turismo y Patrimonio Industrial de Telde. Un binomio pendiente, aborda dese la definición de Turismo y su clasificación adaptada a la oferta de la visita: Turismo rural. Agroturismo. Ecoturismo. Turismo de aventura. Turismo cultural. Gastronómico. Costero. Marítimo y de Salud. Un diverso contenido según la intención o proyecto del visitante, foráneo o local, desde la cultural, histórica, arqueológica, de senderismo, playas. Gastronómica, deportiva, medioambiental, paisajística, arquitectónica, religiosa o etnográfica. Arquitectónica, industrial, artística, etc.

 

Uno de los motivos en los que la doctora Amara Florido ahonda es el del Patrimonio Industrial y su relación con el factor Turismo que nos lleva a la reflexión de binomio pendiente, que en sus diferentes estructuras y formas según sus exponentes, Turismo y Patrimonio Industrial para sacar mejor partido en su resolución han de estar conectados para formar parte de un todo. En su definición Patrimonio Industrial como los restos de la cultura industrial que poseen un valor histórico, tecnológico, social, arquitectónico o científico.  Y como definición de Turismo industrial: Actividad turística desarrollada en emplazamientos, o de nuestro pasado, siempre y cuando su actividad principal no sea o haya sido turística. Su aparición está íntimamente ligada al turismo cultural, una propuesta que quiere atende la demanda de un turista que tiene esas inquietudes más acusadas.

 

Para satisfacer esa curiosidad, hay que ofrecer productos turísticos más especializados. El turismo industrial es uno de esos nichos que, promovido como tal desde hace relativamente poco tiempo, tiene un gran potencial y, en estos momentos, se encuentra en un momento de proyección y rápido crecimiento. Esta alternativa al turismo de masas ofrece un modo distinto de acercarse a la historia y el patrimonio. Permite visitar antigua fábricas y otras instalaciones que han cesado su actividad original y que han sido puestas en valor turístico y cultural. Asimismo, las visitas a empresas en activo (industria viva) posibilitan conocer la realidad del territorio y su motor económico, comprender su desarrollo urbanístico e interpretar el paisaje. En definitiva, sabe de qué han vivido y viven los habitantes del destino visitado. 

 

Un sector importante que está teniendo auge es el relacionado con el plátano, desde las propias fincas se están acondicionando zonas para recibir visitas guiadas donde se les explica todo lo que concierne al cultivo, empaquetado del plátano en Canarias, en Arucas, en Tazacorte. Un ejemplo el de las Destilerías del Ron Arehucas. A nivel de Administraciones, Cabildo,   están viendo en las visitas del patrimonio como un foco de atracción turística y económica, recuperando por ejemplo antiguos hornos de cal y su interpretación. En Gran Canaria uno de los mejores proyectos creados y con mayor éxito es el Proyecto Comunitario de La Aldea con veinte años en activo y lo más importante es que no solo los turistas puedes visitar los distintos centros etnográficos, sino que ha conseguido implicar a la comunidad, propios antiguos trabajadores para que ellos sean los que expliquen sus antiguos trabajos. 

 

En su intervención Amara Florido con una amplia proyección de imágenes para guía e identificación de localidades nacionales como insulares y en particular Gran Canaria y el municipio de Telde. Aparecen recogidos aquellos enclaves fundamentales que tienen que visitar o se sugiere todo el que llega a Telde, hablamos evidentemente del barrio de San Francisco, el barrio de San Juan, El Santo Cristo, Cuatro Puertas, Tufia, etc. En todos estos importantes enclaves no hay ninguno vinculado con el patrimonio industrial, hablamos de patrimonio arqueológico, civil, religiosos, pero hay que ir más allá. 

 

Existen lugares y emplazamientos que creo son fundamentales para que si no se destinan como patrimonio industrial sean recuperados, porque hablamos de turistas, pero nosotros mismos debemos considerarnos así los primeros, y hay que recuperar las instalaciones ya que la ciudadanía forma parte de esa historia industrial y si luego se enfoca al turismo, mejor. 

 

Algunas de las numerosas imágenes que Amara Florido expone en su proyección nos remiten a los iconos industriales del Municipio de Telde. La Azucarera de San Juan y su imponente edificio instalada en 1890 gracias a la iniciativa de un empresario estuvo en activo hasta 1992 y se dedicó a la fabricación de azúcar, destilación de aguardientes, alcohol y caramelos en su último intento. Importantes su sala de máquinas y torre de destilación, antigua caldera de vapor, tanques de calentamiento y tanques de defecación de la melaza.

 

Es un emblema para Telde y la isla de Gran Canaria, en 1997 el Ayuntamiento de Telde la adquiere con pretensiones de convertirla en museo agrario, ubicando Escuelas Talleres y recuperación de la fábrica.  Mantiene importante maquinaria en su interior importada de Escocia en un impresionante escenario que engrandece su pasado tecnológico. Uno de los últimos enclaves que la doctora Amara ha investigado e incluido en el inventario de patrimonio Industrial.  

 

El Molino del Conde, de la calle El Roque, declarado Bien de Interés Cultural (BIC) con categoría etnológica, molino único en Canarias de los pocos molinos de gofio hidráulicos movidos por una rueda vertical. Es de destacar el estudio y exhaustiva investigación llevada a cabo por Juan Ismael Santana. Molino que empezó en 1846 aprovechando el sistema hidráulico del Heredamiento de Aguas de la Vega Mayor de Telde, a iniciativa del cuarto Conde de la Vega Grande, don Agustín del Castillo. Este molino igual que la Noria de Jinámar se va a beneficiar de las innovaciones de la revolución industrial que en materia de mecánicas hidráulicas introdujo su promotor. Desde 2013 es sede del Círculo Cultural de Telde y de otras asociaciones culturales con una continuada actividad de actos culturales.  

 

La Noria de Jinámar, Bien de Interés Cultural, de mediados del siglo XIX, reliquia auténtica del patrimonio hidráulico no solo de Telde, sino de toda Canarias, también fue iniciativa del cuarto Conde de la Vega Grande. Esta noria es un malacate de tracción animal con rampa de subida destacando sus cinco partes, el pozo, la torre octogonal, mampostería y contrafuertes en arcos de medio punto y techos de madera. Sistema de captación de aguas, el estanque y las canalizaciones. Promovida para regar el Cortijo de El Valle plena de cultivos de plataneras de su propiedad. Es una auténtica joya del patrimonio hidráulico y con urgencia, actualmente requiere obras de acondicionamiento para su conservación. 

 

El antiguo matadero municipal de San José de Las Longueras. Almacenes de empaquetados que hoy conservan sus edificios de gran superficie embutidos en los centros urbanos, siendo Telde uno de los municipios pioneros con mayor cantidad de almacenes de este tipo destinados al tratamiento del tomate, empaquetado y transporte para exportar, actividad económica y empresarial que realizaron famosos exportadores de la localidad teldense. A principios de los 60 se instala en Salinetas el complejo de la Compañía Insular de Nitrógeno S.A. la CINSA, importante compañía para la producción de sulfato amónico, fertilizantes de la época, con muelle para su transporte y originó barrios por la cantidad de trabajadores empleados. El silo mantiene su singular diseño, primer edificio de hormigón armado que se construye en Canarias, con 26 arcos parabólicos de naves que semejan un barco invertido, actualmente en una situación lamentable dentro de la belleza y singularidad de su arquitectura. Citar la antigua molinería de los Naranjo en un recinto particular de Las Remudas. 

 

Se muestra el estado actual de nuestro patrimonio industrial legado, unos en estado de rehabilitación y conservación en orden a la visita turística y otros con la necesitada urgente de sacarlos de su estado agónico, abandono, con la pregunta sobre su uso aún por responder, pero, con un potente manifiesto industrial tecnológico escondido, desconocido, expuesto a su despiece de máquinas, componentes, utensilios, herramientas, etc y pérdida de las mismas. Muestras de una época que marcó el auge de la economía gracias a aquella industria generadora de bienes industriales, económicas, laborales y sociales y, aunque ya lejana en la memoria colectiva, sus ubicaciones tanto rurales como urbanas o costeras nos remiten a un pasado histórico que merece la pena no pasar al olvido. Aunque todo depende de las inversiones económicas en recuperar este patrimonio, no debemos buscar solo el beneficio económico sino el beneficio cultural, social, histórico. 

 

Una ponencia tanto documentada como esclarecedora de la situación actual del patrimonio industrial existente y sus posibilidades turísticas de solucionar el binomio pendiente, turismo y patrimonio industrial, en las que Amara Florido pone todo el empeño en sus investigaciones y estudios de campo y realidad del potencial industrial existente, habiendo realizado un importante inventario para el Gobierno de Canarias.

 

Enhorabuena por su intervención y a la organización y coordinación de las Jornadas, programa de ponentes altamente cualificados y la gestión del arqueólogo, Abel Galindo y la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Telde.  Gracias.

 

Reportaje gráfico de la ponencia de Amara Florido

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