La sorpresa de muchos vecinos de La Garita este lunes al salir a la calle no fue precisamente el tiempo calismo. Lo que encontraron fue un panorama propio de un guion de película de barrio castigado por la impunidad: más de 20 vehículos estacionados en la vía pública aparecieron con las cubiertas rajadas, según denunciaron residentes de la zona a TELDEACTUALIDAD.
El acto vandálico se llevó a cabo en la madrugada de esta jornada y cebó especialmente en la urbanización Los Melones y calles colindantes, donde coches y furgonetas amanecieron inmovilizados, víctimas de un ataque indiscriminado que ha dejado a decenas de familias sin poder utilizar sus vehículos para ir a trabajar o atender sus tareas diarias.
Las imágenes hablan por sí solas: ruedas reventadas, neumáticos rajados y vecinos indignados preguntándose dónde está la seguridad en el barrio. La sensación de impotencia se mezcla con la rabia, porque no es la primera vez que en La Garita se denuncian problemas de vandalismo y actos contra la convivencia.
Los residentes denuncian que los destrozos se produjeron tras la celebración de una fiesta en la zona, cuando algún individuo se dedicó a pinchar neumáticos de forma indiscriminada.
Una vecina del barrio relató a TELDEACTUALIDAD lo ocurrido: “Soy vecina de La Garita. Esta madrugada, después de la fiesta de anoche, hubo algún gracioso que se dedicó a reventar las ruedas de los coches con algo punzante. Yo soy una de las afectadas, con mi coche con dos ruedas reventadas. Mi marido salió a trabajar a las 5.00 y no pudo llevarse el coche. Son más de 20 coches los afectados desde la calle Palmera y toda la calle Tulipán. Hasta una familia con tres coches fue afectada”.
El panorama que se encontraron los vecinos a primera hora fue desolador: ruedas rajadas en turismos, furgones y camionetas, dejando a muchas familias trabajadoras sin poder utilizar sus vehículos para ir a sus empleos o llevar a los niños al colegio.
La denuncia no se queda solo en la pérdida económica —el coste de reparar cada neumático puede superar con creces los 100 euros—, sino también en la sensación de inseguridad y abandono que crece en el barrio. “Esto no es una gamberrada, es un atentado contra la vida diaria de la gente honrada”, apuntan los vecinos afectados, que exigen mayor presencia policial y medidas efectivas para evitar que hechos similares se repitan.
“Esto no es una gamberrada, es un atentado contra la vida diaria de la gente honrada”, comentó un residente, que recuerda que arreglar cada neumático puede costar más de lo que muchos bolsillos están dispuestos a soportar de golpe.
Pepi | Miércoles, 10 de Septiembre de 2025 a las 10:58:28 horas
No puede haber un policía en cada calle, pero cámaras de vigilancia ??. Habría que planteárselo. En todo Telde.
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