
Hoy es fiesta en Las Palmas de Gran Canaria (fundación de la ciudad, cuando la conquista castellana), en Arucas y en Telde. Y en tantos otros municipios. Es noche de hogueras, de dejar los malos espíritus y de petición de deseos. Es dar la bienvenida al verano a la vez que se renueva el interior de cada uno, mirando las estrellas, compartiendo un rato con la familia y amigos o brindando con una copa en dirección hacia la luna. Precisamente, en Telde hace alusión a la zona histórica de San Juan que es el núcleo fundacional de la ciudad de los faycanes. Telde es, desde sus inicios, San Juan. Incluso, podría extenderse al binomio que comporta San Juan y San Francisco, uno de los núcleos más bonitos del archipiélago que aguarda la arquitectura popular canaria. San Francisco es, con creces, una auténtica joya.
Viene esto a cuento del descontento creciente en Telde, que anida en el vecindario de San Juan, porque perciben que (por acción u omisión) se está dejando morir o, quizá, hay un intento de tratar de igualar San Juan y San Gregorio. Esto ha sido así con el mandato actual en la Alcaldía y, desconociendo si obedece a una intención clara o simplemente es casualidad, no es de recibo esta política de equivalencia. San Gregorio es el comercio, el ajetreo diario de los locales. Pero Telde, su conjunto histórico y llama naciente, es San Juan. Podemos añadirle San Francisco. Pero nunca se debe rebajar la importancia de San Juan, entrando en juegos impropios de realzar la vida institucional en San Gregorio y, colateralmente, desdeñar San Juan.
Insisto, este pálpito ciudadano va en aumento. Es tema de conversación por las vecinas y vecinos de San Juan. La dinámica de uniformizar San Juan y San Gregorio, en Telde, no solo es impropio sino que daña al municipio. Solo preservando y reconociendo la firmeza y el abolengo de donde nace la ciudad de los faycanes, se puede valorar Telde en su conjunto. Esta práctica ha sido persistente en democracia y el actual equipo de gobierno está a tiempo de que siga siendo así.
Con ocasión de la visita de la Virgen del Pino, que pasó primero por la iglesia en Los Llanos y recabó después en la basílica de San Juan, un tránsito que generó inquietud y debate en el núcleo de Telde, pues no acabó de entenderse que el Cristo de Telde fuese de San Juan a Los Llanos a pasar noche, prendió la conversación coral. Y, en cualquier caso, San Juan (junto a San Francisco) irradia al resto del municipio su importancia. No traten de forma igual lo que no lo es. Aunque pudiese haber motivaciones electorales. Al final, perderían todos. San Juan es el emblema.
Mars | Lunes, 30 de Junio de 2025 a las 13:05:28 horas
(0)Entiendo que todos los barrios de Telde merecen atención, inversión y dignidad, pero no podemos caer en el error de enfrentar zonas. San Juan y San Francisco no son "niñas bonitas" por capricho, sino porque forman parte del casco Histórico y Cultural de la ciudad, con un valor patrimonial que debemos proteger entre todos. Cuidarlo y darle el valor que se merece no significa olvidar otros barrios, que también deben ser atendidos y valorados. Por tanto, cuidemos el centro histórico, no porque sea más bonito, sino porque es irreemplazable. Y al mismo tiempo, exijamos un Telde más igualitario, donde el desarrollo y el respeto lleguen también a las periferias, las costas y las medianías. Lo uno no excluye lo otro. Es simplemente tener sentido común, Defender su conservación no es mimarlos en exceso, sino proteger un legado que pertenece a todos los teldenses, vivan donde vivan.
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