
En Valle Casares, barrio de Telde, los vecinos no abren el grifo: lo consultan, como quien espera una señal. “Buenas noches… seguimos igual. Más de 24 horas llamando a Aguas de Telde y nada”, dice uno de ellos a la 1:45 de la madrugada, sin más compañía que el goteo —literal— del problema.
La avería en la red de abastecimiento no solo deja pérdidas visibles en la calle: amenaza directamente el escaso suministro del que disponen. En Valle Casares, el agua solo corre tres días por semana, y la avería llega justo cuando deberían llenar los depósitos particulares de los cerca de 800 personas.
“La empresa no responde. El Ayuntamiento tampoco. ¿Qué hacemos cuando se vacíen los depósitos?”, se preguntan.
La queja se ha convertido en un clamor en la zona. No por estruendosa, sino por insistente. Cada minuto que pasa, sin respuesta, es un litro menos para las familias, los mayores, los niños, los negocios. Y una gota más en un vaso que muchos sienten ya rebosado.
























Maria | Miércoles, 11 de Junio de 2025 a las 12:57:07 horas
Me parece vergonzoso. Estamos pagando impuestos y no baratos para que hayan barrios de Telde sin apenas agua , carreteras destrozadas y algunas casas sin luz en Casares. Tercermundista. Menos fiestas y más gastar el dinero del contribuyente en mejoras. Mucho superávit de dinero guardado en bancos pero se ve poco por los barrios.
Accede para votar (0) (0) Accede para responder