
El fallecimiento del joven Abdoulie Bah a manos de agentes de la Policía Nacional en el aeropuerto de Gran Canaria ha abierto una brecha política y social que ha llegado al Congreso de los Diputados. El portavoz de Izquierda Unida y diputado de Sumar, Enrique Santiago, registró el pasado lunes 20 de mayo una batería de preguntas dirigidas al Gobierno central en las que reclama claridad y transparencia sobre lo ocurrido.
Santiago exige explicaciones sobre el protocolo seguido por los agentes que abatieron a Bah, de 19 años y origen gambiano, cuando supuestamente amenazaba con un cuchillo a varios ciudadanos y a los propios policías. El parlamentario cuestiona por qué no se utilizaron medios de contención no letales, si se conocía el estado de salud mental del joven y si la actuación podría encuadrarse en un caso de “abuso de la fuerza”.
El documento registrado ante la Mesa del Congreso también pone el foco en un posible patrón de violencia institucional: “¿Existe una destacada frecuencia de utilización desproporcionada de la violencia contra personas racializadas en España?”, se pregunta el diputado. A su juicio, el caso “genera serias dudas sobre el respeto del derecho humano a la vida y al principio de proporcionalidad”.
Las imágenes de la intervención policial, captadas por cámaras del aeropuerto, se han viralizado en redes sociales, avivando la polémica. El suceso está bajo investigación judicial por parte del Juzgado de Instrucción número 2 de Telde.
Desde el colectivo Canarias Insumisa también se ha alzado la voz. En un comunicado público, la organización exige “información urgente, clara y transparente por parte de las autoridades competentes” y cuestiona abiertamente el uso de armas de fuego en un caso como este.
Mientras tanto, el Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha defendido la actuación de los agentes como “de libro” y ha reiterado su demanda de dotar a los efectivos con cámaras personales para registrar todas las intervenciones. “Así habría seguridad jurídica para todos”, remarcan sus portavoces, que han ofrecido además respaldo legal y psicológico a los implicados.
El delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana, respaldó la actuación policial calificándola como “una respuesta ante una agresión clarísima”, según declaraciones recogidas por la agencia Efe.
Abdoulie Bah, que llegó a Canarias en patera cuando aún era menor de edad, vivió en un centro de acogida hasta alcanzar la mayoría de edad. Más tarde compartía vivienda con otros jóvenes en Lomo Blanco. Había completado estudios de ESO y FP básica, y había trabajado como albañil, mecánico y más recientemente como cuidador en un centro de menores. Su entorno destaca que atravesaba momentos difíciles relacionados con su salud mental.
El pasado 17 de mayo, sobre las 17.00 horas, un taxista alertó de un intento de agresión por parte del joven con un cuchillo. Cuatro agentes acudieron al lugar y, tras varios intentos verbales para que soltara el arma, y un forcejeo que acabó con uno de los agentes derribado, dispararon cinco veces, una de las balas impactando en el cuello. Abdoulie falleció poco después, pese a los esfuerzos por reanimarlo.
Imágenes y video de la intervención policial en el Aeropuerto de Gran Canaria


























Helena santana | Sábado, 24 de Mayo de 2025 a las 20:45:54 horas
Aquí los únicos culpables son las instituciones competentes y nadie más, es más fácil culpar a los policías .
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