
El entrenador de la UD Las Huesas, Óliver Pérez, aseguró que su equipo llega con “ilusión, actitud positiva y muchas ganas” a la fase de ascenso a Primera Regional tras una temporada complicada en la que él se incorporó en las seis últimas jornadas. “La valoración que puedo hacer es parcial, porque llegué muy tarde. Pero en esas seis jornadas el equipo se ha adaptado a mi filosofía y a la idea de juego que tengo. Gracias a eso hoy estamos en playoffs”, explicó.
Pérez subrayó que, tras el descenso del curso anterior, el club ha logrado recomponerse con una plantilla amplia y competitiva. “Cuando un equipo baja de categoría, las cosas se complican. Hay que recuperar jugadores y construir un proyecto que ilusione. En ese sentido, el club ha hecho un buen trabajo”, valoró.
El técnico reconoció que, aunque su objetivo no era necesariamente ascender este año, su grupo está convencido de que puede lograrlo. “No cabe la menor duda de que el esfuerzo no se negocia en mi equipo. Estamos mentalizados. Sabemos que es difícil, pero vamos a intentarlo por todos los medios”, afirmó.
Sobre el nivel de la Segunda Regional esta temporada, Pérez señaló que en su corta experiencia ha podido comprobar la calidad del grupo. “En estas seis jornadas me he enfrentado a varios equipos que estarán en playoffs, y todos tienen una planificación muy buena. Hay jugadores que podrían estar en categorías superiores, pero que por pertenecer a clubes de barrio o pueblo se quedan. La categoría está fuerte”, opinó.
En cuanto al rival de la primera eliminatoria, el CD Cardones, fue claro: “Nos lo va a poner muy difícil. Es un equipo que quedó tercero en la Segunda del Norte, tiene jugadores a los que les gusta tener el balón y una buena salida desde atrás. Pero nosotros también sabemos a qué jugamos. Será un partido disputado, bonito de ver, entre dos equipos que apuestan por tener la pelota. Cada uno con sus armas”.
Pérez también comentó el cuadro general de los cruces y la posible dificultad del camino: “Para ascender hay que jugar con los mejores. Nos ha tocado el lado del cuadro que nos tocaba, no hay más. Si pasamos, podríamos tener un derbi con el Calero, y luego vendría La Estrella. Son equipos de nuestro nivel. Pero si queremos subir, hay que ganar a todos”.
Sobre las posibilidades reales de ascenso, el entrenador se mostró prudente pero optimista: “Cada eliminatoria la veo 50-50. Hay tres resultados y ojalá sea favorable. Si no, seguiremos trabajando para la próxima temporada. Pero lo que sí veo es un equipo motivado, con ganas y con ilusión. Entrenan con actitud, y como se entrena, se juega”.
























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