
El pasado 9 de abril, mi perrita Kara no pudo resistir el impacto del atropello. Ese día, su diminuto corazoncito dejó de latir y, con él, también se detuvo mi mundo.
Sigo pidiendo desesperadamente ayuda ciudadana para que se haga justicia por lo que ha sucedido.
Mi hijo, debido al estado de shock, no pudo identificar con claridad el color del vehículo. Cree que se trataba de un Toyota Yaris de color azul, aunque otros testigos aseguran que era gris. El accidente tuvo lugar en El Cascajo, pueblo de Jinámar, doblando la farmacia, justo a la altura del parque infantil.
La conductora era una señora de pelo rizado, largo y rubio, de complexión media. Tras lo ocurrido, bajó del vehículo asegurando que el perro estaba bien, a pesar de que Kara presentaba una fuerte cojera, sangraba por la boca y su cuerpo daba saltos por el impacto. Aprovechando el caos del momento, mientras varias personas intentaban ayudar, esta mujer se subió de nuevo a su coche y huyó, dejando a un menor y a la perrita sin ningún tipo de asistencia.
Solo pido justicia por Kara. Si alguien reconoce a esta persona o tiene alguna sospecha, por favor comuníquese al número 696 280 746. Gracias de corazón a quienes estuvieron presentes ese día. Algunos recuerdan claramente su cara y su físico. Si todos compartimos esto, podemos lograr que se haga justicia y encontrar a la persona que causó esto sin mostrar remordimiento alguno.

























Fatima | Martes, 15 de Abril de 2025 a las 15:21:32 horas
Como gusta hablar sin saber,la perrita llevaba collar ya llevaba encima un niño al que también hubiese podido atropellar
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