
Máximo Guerra, quien fue supervisor durante 23 años en el CAE de Telde, se despide de su carrera profesional con una emotiva jubilación. Su trayectoria, que comenzó como enfermero de urgencias en el Hospital Insular, continuó en el CAE de Telde y finalizó en el Ambulatorio de Santa Brígida, se ha caracterizado siempre por su dedicación y calidad humana. Este pasado sábado, reunió a sus compañeros en un restaurante de Las Palmas de Gran Canaria para celebrar su despedida.
Los asistentes coincidieron en destacar la suerte de haber trabajado con Máximo, un profesional que no solo se implicaba en sus tareas, sino que también tenía un trato cercano y familiar con los pacientes.
En el encuentro, se habló del día a día en el ámbito sanitario, valorando el compromiso y la entrega de Máximo con su equipo y con los usuarios. El traumatólogo Atilio Sánchez, recordando los años compartidos, expresó: “El tiempo que trabajamos juntos superamos en mucho el número de pacientes atendidos, pero siempre buscamos hacerles la vida más fácil”. Estas palabras fueron seguidas por un sonoro aplauso de todos los presentes.
La despedida estuvo marcada por un ambiente de afecto y admiración hacia Máximo, quien deja un legado de responsabilidad, compromiso y humanidad en cada compañero que tuvo el placer de trabajar junto a él. En un ambiente lleno de cariño y reconocimiento, sus compañeros le desearon lo mejor para esta nueva etapa, diciéndole con una sonrisa: ¡¡Muchas felicidades, Máximo!!
Reportaje gráfico de la despedida a Máximo Guerra en su jubilación
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