Conversaciones imposibles. Serpiente de verano

La mañana era proclive a un baño refrescante, la panza de burro, que se había extendido hasta nuestro municipio, invitaba a sumergirme en el agua. Estaba fría al principio, pero rápidamente se convirtió en un alivio delicioso. Vigilante estaba Neptuno, dios romano del mar y los océanos, presto a cualquier cambio del tiempo, su tridente firme y poderoso nos indicaba que la calma reinaba en las olas. Algo se movía a su alrededor y a medida que me acercaba observaba como una especie de serpiente se apresuraba a enredarse en lo más alto de su horca de tres puntas.

No te asustes me dice, soy una serpiente de verano y aprovecho este sofocante calor para refrescarme y que mejor junto a mi amigo Neptuno. Se, que se me utiliza, para describir aquellas noticias irrelevantes o sorprendentes que los medios publican durante el verano, especialmente cuando la mayoría de los políticos están de vacaciones y no hay sucesos de gran relevancia. Es como una especie de relleno, en una época donde la actividad informativa suele ser escasa. Mis hermanas, la serpiente de California que tanto han proliferado en esos últimos tiempos, me tienen informada del devenir de nuestra ciudad.

De pronto, susurrando por lo bajo me dice – ese puf del verano, donde Rita Cabrera, concejala de Vox, quería hacerse una Janoa Anceaume, o sea, decir que se iba también de su partido, para que le ofrecieran entrar en el grupo de gobierno y luego irse al grupo de los no adscritos. Pero la jugada no salió bien, continua, no porque no lo intentaran quienes manejan los entresijos políticos en Telde y que además no están en el gobierno, ni falta que les hace, Janoa es una prueba de ello; había más pretendientes para cambiar esas mayorías que ahora se dan. Acércate un poco más, me dice, se por mis hermanas, que ha habido reuniones desde la cumbre, hasta el mar.

Estaba poniendo al día a Neptuno, cuando te acercaste. Me contaba, que también él había visto y escuchado por estos paseos, los ofrecimientos para que se dieran los cambios en las mayorías que ahora se daban. Sin embargo, ahora, nadie sabe nada, nadie se ha reunido. Con una sonrisa entre mueca y burla se mueve por el contorno del tridente y me pregunta, ¿se puede dar esos cambios?, darse se pueden dar, le digo, eso sí, cuál sería el coste y quien está dispuesto a correrlo. Continuo con mi relato, tanto Neptuno como la Serpiente del Verano prestos a escuchar lo que les iba a decir, se, que ha habido conversaciones cruzadas, tanto por parte de la oposición como por parte de miembros del gobierno. Quienes hicieron posible esta mayoría arrancando al partido de ultraderecha una concejala, se mueven entre bambalinas para evitar que el gobierno, ¡su gobierno!- llevan esperando desde que abandonaron el poder o fueron expulsados de él en el 2013, este momento, caiga en manos de quienes consideran sus enemigos políticos desde hace muchos años.

Entonces crees, me dice la serpiente, ¿qué todas estas movidas tiene un plan premeditado para ampliar el apoyo al gobierno?, cualquier cosa en Telde, continuo, es posible. Ahora hay una mayoría que apoya al gobierno en el salón de plenos y la moción de censura es legítima en democracia, pero eso tiene un coste político. Tanto por un lado como por otro, tratan de buscar esos apoyos que apuntalen sus aspiraciones, pero ya les digo, que esa reuniones existen y existirán de un lado y de otro, pero quienes manejan los hilos saben que deben transitar por un camino con minas, con muchas minas, no solo ideológicas sino de egos y eso amiga mía, es lo que más pesa, me voy a refrescar me dice la serpiente y se zambulle, saludo a Neptuno y hago lo mismo, el agua atempera las ocurrencias.

Gregorio Viera Vega es exconcejal socialista del Ayuntamiento de Telde.