¿Usted se ha vuelto loco?

Amigos lectores-as, seguro estoy de que más de una vez hemos recibido la frase del título de hoy. Me sonrío cuando aun recuerdo que hace tiempo, al ver a un muchacho, con buenas cualidades para ser sacerdote, le dije abiertamente: “Oye, ¿te gustaría ser sacerdote?” Y él, mirándome, se arrugó todo y me dijo: “D. Paco: ¿Ud. se ha vuelto loco?”

Amigos, sabemos bien que la vocación al sacerdocio siempre es una llamada que hace Jesús para seguir sembrando el Evangelio que él trajo y esto me lleva a pensar que Dios sigue hoy llamando a gente para que siembre la buena Semilla que él mismo trajo a nuestra Tierra. Bien le decía a sus discípulos: “Todo poder me ha sido dado en el Cielo y en la Tierra. Vayan por el mundo y bauticen en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo y enseñen a cumplir todo lo que yo les he enseñado.” 

Amigos-as, les pido que si conocen algún muchacho que quiera ser sacerdote que lo comuniquen a la parroquia donde se les dirá con alegría los pasos que debe dar para entrar en el Seminario, que es el lugar donde recibirá la formación durante algunos años para luego recibir el Sacerdocio.  

Todavía con mucho gusto recuerdo mis primeros años de Seminario que estaba entonces en la calle Doctor Chil y que por las tardes, cuando salíamos a dar un paseo vestidos de sotana, la gente que nos veía nos decía así: “¡Miau, chao gatitos!”

Amigos-as, creo que Dios hoy sigue llamando a jóvenes al sacerdocio porque se necesitan sembradores del Evangelio en nuestro mundo, y por eso les pido que, si ven algún muchacho que quiera ser sacerdote, que deprisa lo comuniquen a la parroquia donde se le dirá con alegría los pasos que debe dar para entrar en el Seminario, que es el lugar donde recibirá formación durante algunos años para lugo recibir el Sacerdocio. Termino deeándes a todos un buen fin de semana.

Francisco Martel es sacerdote.