Raquel Carballo, madre de dos hijos con una gran discapacidad, ha compartido su desgarradora historia de lucha y sacrificio en su búsqueda por mejorar la calidad de vida de sus hijos. Sus dos hijos, con 21 años de edad, llevan tres años y tres meses en el centro para personas con discapacidad de San José de Las Longueras, en Telde. A pesar de su deseo de trasladarlos a un centro más cercano a su hogar en Las Palmas de Gran Canaria, Raquel aún no ha recibido el traslado solicitado.
La difícil situación de Raquel se agrava aún más por la falta de recursos y el inadecuado acceso al centro. No posee carné de conducir, lo que le obliga a recorrer largas distancias y a depender de múltiples transportes públicos para visitar a sus hijos. Cuando sus hijos se ponen enfermos, Raquel se enfrenta a la angustiosa realidad de no poder acompañarlos debido a la distancia.
El reciente accidente de uno de sus hijos mientras recibía cuidados en el centro ha profundizado aún más su desesperación. A pesar de la profesionalidad de los cuidadores, Raquel no puede evitar cuestionar cómo ocurrió el incidente y la falta de medidas preventivas adecuadas.
La difícil situación económica de Raquel se suma a su carga emocional. El costo de un taxi para llegar al centro de San José de Las Longueras es prohibitivo, y cualquier reparación de la costosa silla de ruedas de su hijo supondría una carga financiera adicional.
La espera de Raquel por un traslado a un centro más cercano se ve obstaculizada por la escasez de plazas disponibles y la prioridad de mantener a los hermanos juntos. Aunque el Cabildo de Gran Canaria reconoce sus dificultades y se esfuerza por encontrar una solución, la realidad es que las necesidades de Raquel y sus hijos continúan siendo un desafío que aún no se ha superado.
Carmen | Domingo, 09 de Junio de 2024 a las 21:15:06 horas
Todos toreamos muy bien desde la barrera ,pero quién está en el ruedo es está madre y otras como ella que luchan diariamente por sus hijos con este tipo de enfermedades.Muy duro que quieran juzgar su situación, ya que seguramente no tiene las condiciones óptimas tampoco en su domicilio porque son dos hijos con gran discapacidad **** una circunstancia con doble complicación y que sean capaces de señalarla como madre despreocupada
Que baje Dios y lo vea
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