Oti, la empresaria de Telde que encaró un cáncer con alegría y fe

En medio de la rutina de la vida diaria, hay personas que irradian una energía especial, capaz de llenar de alegría cualquier espacio que pisen. Otilia Naranjo, conocida cariñosamente como Oti en Telde, es una de esas personas. Su vitalidad y su inquebrantable fe la han llevado a sobrellevar uno de los momentos más difíciles de su vida con una sonrisa en el rostro.

Hace poco más de un año, Oti anunció el cierre temporal de su tienda en la zona comercial abierta de Los Llanos de San Gregorio (Telde) para concentrarse en su tratamiento contra el cáncer. Ahora, con la misma energía que siempre la ha caracterizado, se prepara para reabrir las puertas de su negocio el próximo 19 de abril, según anuncia La Provincia en un reportaje de Esther Medina.

Desde pequeña, Oti supo que su pasión era la moda y la ropa. Aunque inicialmente se dedicó al sector de la estética, un giro inesperado en su vida la llevó a cumplir su sueño de abrir su propia tienda. Junto a su hermana Pino, quien la ha acompañado en este proyecto, Oti ha convertido su tienda en un espacio único y lleno de color.

El diagnóstico de cáncer llegó como un golpe inesperado, pero Oti decidió enfrentarlo con valentía y optimismo. Con el apoyo incondicional de su familia y amigos, transformó las sesiones de quimioterapia en divertidos viajes imaginarios y encontró motivos para reír incluso en los momentos más difíciles, como cuando perdió el pelo.

Ahora, mientras se prepara para retomar su vida cotidiana y profesional, Oti quiere que su experiencia sirva como ejemplo de que el cáncer, o cualquier otra prueba de la vida, puede superarse con alegría y fe. Con el amor de su familia, la fuerza de su fe y su pasión por la moda, Oti afronta un nuevo reto con la misma sonrisa que siempre la ha caracterizado.