
Desde hace ya un buen tiempo, hemos dejado de oír las campanas de nuestra Basílica para llamar a las Eucarístías y/o a los entierros.
La verdad es que se echan muchísimo de menos, pues sólo sonaban durante la semana, por las tardes, al aproximarse la hora de la Eucaristía y también, si había algún entierro (con o sin misa) siendo sólo los festivos, cuando había más llamadas a la Celebración Eucarística, en los horarios que éstos días tenía y tiene la parroquia.
Vamos, nada que resultara cansino, pues como digo, eran a horas puntuales para las Eucaristías y la celebración de la Palabra, en los entierros.
Los que hemos nacido, crecido y seguimos viviendo, como se suele decir “bajo las campanas”, en ningún momento nos ha causado ningún malestar; al contrario; acompañaban, además de “llamarnos” a las Celebraciones Eucarísticas
Lo del reloj de la Iglesia, ¡estupendo que esté funcionando!, lo de la rotulación de la Plaza de San Juan, pues que se tenga y se le ponga el color que se considere el más apropiado, ¡también!; pero las campanas “enmudecidas” no lo entiendo y me gustaría que alguien me explicara el motivo de esto y que por supuesto, se busque la manera de que se vuelva a recuperar “su voz”.
A. León Fernández | Lunes, 19 de Febrero de 2024 a las 16:59:59 horas
Y yo como un desesperado buscando un reloj antiguo de péndulo, para ponerlo en mi casa
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