Bienestar físico

Todas las mañanas al despuntar el alba, me las encuentro en la avenida en corrillo, son 7 u 8 personas que bien temprano, participan en una conversación animada del devenir del día a día, cuando la ciudad empieza a despertarse. Te haces varias ideas en unos segundos del fugaz encuentro, donde se me antoja que todas ellas, coinciden a esa hora y que quieren compartir un espacio mañanero; pero son amigas, que con el paso del tiempo han entendido que su salud física al igual que la mental bien merece madrugones para ejercitarse.

El bienestar físico es un aspecto importante de nuestra salud general y tiene diversas consecuencias en nuestra vida diaria, es importante considerar el bienestar físico en conjunto con otros aspectos de nuestra vida, como la salud y la calidad de vida. El bienestar físico se refiere a hacer todo lo posible para fortalecer y cuidar nuestro cuerpo. Esto implica llevar un estilo de vida saludable que incluya una alimentación equilibrada, ejercicio regular, descanso adecuado y evitar hábitos perjudiciales como el consumo excesivo de alcohol o el tabaquismo. 

Cuando nos sentimos físicamente bien, tenemos más energía, mejoramos nuestra capacidad para enfrentar desafíos diarios y nos sentimos más satisfechos con nosotros mismos Además, el bienestar físico está estrechamente relacionado con nuestro bienestar mental. Ese bienestar físico en la tercera edad, es crucial para mantener una calidad de vida óptima durante esta etapa de nuestra vida. A medida que las personas envejecemos, podremos enfrentarnos a desafíos específicos en términos de salud y condición física. 

Hay aspectos a tener en cuenta para el fortalecimiento del bienestar físico, como el ejercicio regular, que es esencial para mantener la fuerza muscular, la flexibilidad y la salud cardiovascular; una dieta equilibrada y nutritiva; la salud mental y emocional es parte integral del bienestar general; las caídas son comunes en la tercera edad y pueden tener consecuencias graves. Mejorar la fuerza muscular, equilibrio y coordinación, así como hacer ajustes en el hogar para reducir los riesgos de caídas, las revisiones médicas periódicas son esenciales para detectar y abordar cualquier problema de salud de manera temprana y como no tener en cuenta que a medida que envejecemos, es posible que sea necesario realizar adaptaciones en el estilo de vida para abordar las necesidades cambiantes.

En general, el bienestar físico en la tercera edad implica un enfoque de que cada realidad es un todo y que se deben abordar varios aspectos, físicos, mentales y sociales. La atención preventiva y la adopción de un estilo de vida saludable pueden contribuir significativamente a mejorar la calidad de vida durante esta etapa. El bienestar social de un país va mas allá de indicadores económicos y aborda la calidad de vida en su conjunto., donde cada individuo tiene la oportunidad de desarrollarse plenamente y contribuir al bienestar colectivo, donde el bienestar físico, es piedra angular en un segmento de la sociedad que es mas longeva, con acceso a servicios, mas saludable y que socializa para compartir esos espacios saludables.

El bienestar físico, mental y social es un estado positivo en el cual nos sentimos saludables físicamente, tranquilos mentalmente y en paz con nuestro entorno, se trata de un estado interno que no depende tanto de las circunstancias externas, sino principalmente de nuestra manera de percibir lo que nos sucede.., desde la acera de enfrente