Las elecciones europeas son a circunscripción única de naturaleza estatal y sin barrera electoral. Vamos, la cita idónea para los terceros partidos de ámbito estatal (como le sucedió a Podemos en 2014 y que ahora intentará repetir éxito) y la menos conveniente para las formaciones nacionalistas periféricas. Este 2024 antes habrá que observar qué sucede en Galicia y Euskadi mas toca ya prepararse para la arrancadilla a la Eurocámara. Nueva Canarias va a estar presente pues la defensa de los derechos canarios en Bruselas se antoja imprescindible. Y lo hará a través de un acuerdo marco con otras formaciones que le permita asegurarse que todo aquello que considere la izquierda canaria como importante para esta tierra tenga oportuna voz en el Parlamento Europeo. Y, cómo no, emplearse a fondo en frenar a la extrema derecha que pulula en el Viejo Continente.
Nueva Canarias tendrá que valorar si va en la lista conjunta de EH Bildu y ERC o, por otro lado, con Sumar. En la medida que adopte una vía u otra estará delimitando el perfil ideológico de la organización que preside Román Rodríguez, cuyo peso institucional anida en Gran Canaria. Las dos opciones tienen sus aspectos positivos, eso sí, de diferente cariz.
Si decide ir de la mano de EH Bildu y ERC se enganchará al vagón de presión en Madrid por el cual lograr más réditos del actual Gobierno de coalición de PSOE y Sumar. Tanto los vascos como catalanes de izquierdas son socios imprescindibles de Pedro Sánchez y disponen ‘per se’ de un mayor margen de maniobra que Sumar.
Si se decanta por la oferta electoral de Sumar la interlocución directa será con Yolanda Díaz y puede que quepa la opción de que a medio plazo la gallega prefiera que en las islas sea Nueva Canarias la que se encargue de su espacio político. Una especie de Compromís. Aunque esto constriñe mucho a Nueva Canarias pues, en el fondo, es un partido nacionalista canario al estilo de PNV, BNG… Y Yolanda Díaz no está en esas; ahora bien, defiende la plurinacionalidad del Estado español, la convicción de la nación de naciones.
En fin, que de una forma u otra Nueva Canarias aspira a ser partícipe del debate europeo, desde una mirada pancanaria. Al pueblo canario, como en otras latitudes, nos queda lejos (también mentalmente) lo que se resuelve en Bruselas y, sin embargo, es de vital importancia en nuestro día a día. Tanto que ahora la problemática es el temor al auge de la ultraderecha que, sin duda, llevará al proyecto comunitario al desguace.
Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.19