"Mirar al Santo Cristo de Telde es mirar a un Dios hecho hombre"

La teldense Luz Belinda Medina Ramírez pregonó este lunes en la Basílica de San Juan las fiestas religiosas del Santo Cristo de Telde. Profesora y licenciada en Teología, esta vecina del municipio habló de lo que para ella representa la centenaria y venerada imagen que este martes descenderá desde la hornacina superior del altar mayor del templo matriz de la ciudad para permanecer hasta el próximo 22 de septiembre junto a sus devotos. TA avanza reportaje gráfico y el texto íntegro del pregón.

El pregón comenzó pasadas las 20.00 horas con la asistencia de un nutrido grupo de fieles que llenaban el templo y una amplia representación de la Corporación municipal encabezada por el alcalde Juan Antonio Peña.

Luz Belinda Medina Ramírez, natural de Telde y vecina del barrio de San Antonio, compartió con los asistentes sus vivencias y experiencias más íntimas ante la imagen del Santo Cristo. Una efigie de incalculable valor artístico y espiritual, modelada a base de pasta de millo y cuya autoría se atribuye a los indios tarascos de México, aproximadamente sobre el año 1555, en el taller de Matías de la Cerda. Y a la que la pregonera está muy unida ya que, prácticamente, desde que nació forma parte de la parroquia y desde el año 1993 imparte catequesis a los jóvenes de la misma. Además, de licenciada en Estudios Eclesiásticos por la Facultad de Teología del Norte de España (Sede de Burgos) y en la actualidad finalizando la licenciatura en Teología Dogmática en el Instituto Superior de Teología de las Islas Canarias, la pregonera es profesora de Religión y miembro del Equipo de Juventud y secretaria del Secretariado de Pastoral de Juventud de la Diócesis de Canarias.

Sobre el Santísimo Cristo de Telde, la imagen cristológica más venerada dentro de la provincia de Las Palmas, Medina dijo que para muchas personas es el “primer acceso a Dios”. “Es un hombre casi desnudo, maltratado, y clavado en un madero, para provocar su muerte. Un hombre despojado de todo, con los brazos abiertos, sin posibilidad de cerrarlos, y sin embargo, a su vez es una imagen que despide una paz que no se puede explicar”, y al que muchos acuden agradecidos o buscando consuelo, fundamento o significado a través de aquel a quien representa.

“Cuando quiero dirigirme a ese Dios en el que creo, a mi mente me viene siempre como primera el rostro de este Cristo, el de Telde, el Cristo de la aguas, el Cristo de la misericordia, y de mucho otros nombres que popularmente he escuchado en las voces de mi familia, y de la comunidad de Telde. Éste fue, el rostro con el que primeramente me acerqué, si me permiten la licencia a mi Dios, al Dios en el que creo y que me sostiene. Y a través del cual, me doy cuenta que es el “culpable” de ese concepto de Dios que me ha acompañado durante mi vida”, enfatizó la pregonera.

Para Luz Belinda Medina, el Cristo de Telde transmite una serenidad, una paz y paciencia muy valiosa para los creyentes a la hora de afrontar las adversidades de la vida, el sufrimiento constante por las guerras, violencia de toda clase, desesperación, hambre y desastres naturales de los tiempos actuales. “Este Cristo nos invita a la serenidad, a la paz, que no a la pasividad. A una paz que nos lleva a entender que en la paciencia está la virtud, que hay que esperar y confiar, aunque no lo entienda, porque él siempre sabe más”, expuso.

El papel de los jóvenes en la Iglesia
Y también de aceptación frente al conformismo. Aceptación de una realidad como la falta de jóvenes que participen en la vida religiosa. “Los jóvenes no sienten que haya un espacio para ellos. No se sienten libres de cambiar lo que no consideran correcto. Porque nuestras comunidades se han vuelto conformistas, y en muchos casos, repetidores de tradiciones, a las cuáles ni siquiera muchos de nosotros le sabemos dar un sentido. Podríamos decir, que más que aceptar a los jóvenes, nos conformamos con que estén en nuestras parroquias.

Ante esta realidad, Luz Belinda Medina invitó a los católicos a abandonar posiciones conformistas y a tener coraje para salir a las periferias físicas, culturales, espirituales y existenciales. “Mirar a este santo Cristo de Telde, es mirar a un Dios hecho hombre, que nos invita a salir a las periferias. A las materiales: las de aquellos que no tienen para vivir, los pobres, pero también a la de los que tienen tanto, que se han olvidado de lo que es fundamental”, advirtió.

"En el corazón de Dios nadie sobra"
Y lanzó un mensaje de apertura, encuentro e inclusión. “Esta figura de brazos abiertos, me recuerda que en el corazón de Dios nadie sobra. Siempre que he mirado al santo Cristo, he sentido que nadie quedaba fuera, y quizás por eso, nunca he entendido mi comunidad como un lugar donde no hubiese espacio para uno más. Esta hermosa imagen, siempre me ha llevado a entender y a sentir, que los demás eran un lugar privilegiado para encontrarme con Él, para conocerlo y para entender qué era lo que esperaba de mí y de esta realidad. Sus fiestas del Cristo, repletas de rostros, que en muchos casos solo veía en esas fiestas o que no volvería a ver más, me recordaban que la Iglesia consiste en un nosotros y no en hablar o mirar a los otros”, apostilló.

En este sentido, la pregonera profundizó en la necesidad de “construir una comunidad de San Juan, un pueblo de Telde, una Iglesia Diocesana de Canarias que se centre en los individuos, no en el individualismo; que se centre en construir puentes y no murallas; que se centre en el diálogo y la escucha activa y no en la palabrería y el oír para rebatir, que nos centre en sociedades más fraternas, porque la sociedades globalizadas ciertamente nos han hecho más cercanos pero no más hermanos”.

Para finalizar, Luz Belinda Medina brindó al Santo Cristo de Telde una oración y un recuerdo agradecido por todas las personas que han contribuido a “tener en mi vida el regalo de la fe, de la esperanza y de un amor que no tiene límites”. “Que comiencen las fiestas del Santo Cristo con la alegría de saber que éste que viene a nosotros tendrá éxito, porque su éxito consiste en tener a sus hijos junto a él. Felices fiestas del Cristo y que viva el Cristo de Telde”, concluyó la pregonera.

Concierto de la Banda Municipal de Música

Tras el pregón, la Banda Municipal de Música de Telde que dirige José Martel  dedicó "una bella selección de composiciones que para esta ocasión bajo el crucero y presbiterio de la Basílica Menor de San Juan Bautista, Una brillante ejecución de composiciones y arreglos para banda como: Band of Brothers. Gabriel's oboe. Concierto de Aranjuez. Hallelujah. De L' Arlésienne, Pastoral y Farándola, según resalta el colaborador cultural Jesús Ruiz Mesa.

"El repertorio presentado por el director con las brillantes intervenciones solistas instrumentales en los temas Gabriel's oboe y el Concierto de Aranjuez. Concierto muy bello y con la excelente calidad musical interpretativa y dirección de la Banda Municipal de Música de Telde, felicitada por el párroco don José María Cabrera, alcalde de Telde, corporación y la ovación con el aplauso del público asistente. Un emotivo y bello comienzo de esta fiesta 2023, dedicada a la Bajada del Santo", precisa Ruiz en una crónica breve y apresurada para TELDEACTUALIDAD..