El nuevo gobierno de Telde busca urgente un nuevo albergue municipal de animales. Las pequeñas instalaciones que tiene habilitadas desde hace años al pie de los Siete Puentes, en una orilla del barranco Real de Telde, ya no dan abasto. Literalmente no tiene dónde meterlos. Tanto es así que, según se quejan algunas protectoras, en alguna ocasión ya se ha negado a recogerlos.
El concejal responsable de Protección Animal, Juan Francisco Artiles, recuerda a Canarias7 que este problema no es ni mucho menos exclusivo de Telde. La decisión del albergue insular de Bañaderos, inmerso en una política clara de sacrificios 0, de negarse a recoger animales, salvo contadísimas excepciones, ha pasado la pelota al tejado de los ayuntamientos, muchos de los cuales no cuentan con las instalaciones adecuadas para afrontar esta necesidad.
Así y todo, Artiles deja claro que la conciencia de que comparte este contratiempo con buena parte del resto de los municipios de la isla no le resta ni un ápice de energía ni de voluntad al nuevo gobierno, que ha iniciado una carrera contra el tiempo para dotarse de unas dependencias, aunque sea con carácter provisional, que les permita absorber la elevada demanda del servicio de recogida de animales.
El concejal recuerda que para afrontar los 400 abandonos de media que se producen al año en Telde, la ciudad solo dispone de 15 jaulas para perros y de dos gateras. «Jaula que se vacía, jaula que se ocupa al día siguiente». Y al problema del abandono se le suman las incautaciones de animales por parte de la Policía Local, que interviene en casos de maltrato o mala atención.
El alcalde, Juan Antonio Peña, avanza varias opciones, entre ellas, una parte del campo de tiro de Lomo Pollo o habilitar una nave municipal. Los visitará estos días.

























Esther | Martes, 11 de Julio de 2023 a las 09:26:33 horas
Entonces mintió Peña, cuando decía que este lugar no era apto y que los animales iban a morir, poco menos que los estaba matando la anterior alcaldesa. Ahora resulta que se vacía y se ocupa al día siguiente, la verdad vuelve a relucir, el trabajo de Arencibia, anterior concejal, fue bueno. Las mentiras tienen las patas muy cortas.
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