El Cabildo de Gran Canaria trabaja a marchas forzadas «para reabrir lo antes posible» el ramal de acceso a la GC-1 en sentido sur-norte desde la Avenida del Cabildo o GC-10 y también el carril anexo a la autovía en el que desemboca, según informan voces autorizadas de la institución insular. Aún no hay operarios a pie de obra porque las tareas están ahora en la fase de estudio de los daños y también de redacción del proyecto de rehabilitación que finalmente sea necesario. Todavía no se aportan plazos ni fechas.
La información es poca, pero desde el área de Obras Públicas, que coordina el nuevo consejero Augusto Hidalgo, apuntan que los técnicos optaron por el cierre al tráfico de esos dos tramos de calzada como medida de precaución por los daños que un camión-grúa causó a los bajos del puente por el que la GC-1 cruza por encima la Avenida del Cabildo o GC-10, la principal vía de entrada y salida al casco de Telde, según publica Canarias7.
Tal y como avanzó TELDEACTUALIDAD, el accidente tuvo lugar el pasado jueves cuando un vehículo de grandes dimensiones impactó contra la parte baja del pequeño viaducto y ocasionó desperfectos, visibles a simple vista, en los tramos centrales de tres vigas transversales, las situadas más hacia la costa.
En principio, desde el Cabildo apuntan que los daños no son graves, aunque están por confirmar si tienen un mero carácter superficial o si, por el contrario, han tenido una incidencia mayor. Es por eso que, mientras tanto, se ha optado por cerrar el ramal de acceso a la GC-1 en sentido sur-norte desde la Avenida del Cabildo porque el carril en el que desemboca es el que pasa directamente por la parte del puente cuyos bajos han sido dañados por el accidente. Lo que se pretende evitar es que pase demasiado peso por esa zona de la calzada sujeta por esas tres vigas.
«No hay retenciones», pero sí se ha perdido fluidez en el tráfico
Desde el Cabildo se subraya que el cierre de esos dos tramos del entramado viario que conecta la GC-1 con la ciudad de Telde no está dando lugar a retenciones. Los técnicos de la institución han hecho un seguimiento especial a las posibles incidencias a las que da lugar y no han detectado mayores consecuencias, salvo, eso sí, una cierta pérdida de fluidez en el tráfico.
Los usuarios sí constatan que, sobre todo en horas punta, el cierre del ramal de salida hacia la capital desde la Avenida del Cabildo satura de tráfico la llamada rotonda de las escudillas, en torno a la que se producen pequeñas colas, tanto para los vehículos que bajan de Telde como para los que suben desde la costa. La circulación se ralentiza un poco.
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