Un vehículo que estaba aparcado en la calle de Río Tormes, en el barrio teldense de Caserones Altos, ardió esta madrugada. El siniestro se produjo sobre la una de la madrugada y los vecinos sospechan que el fuego intencionado porque no es la primera vez que se intenta quemar este coche.
Las llamas fueron extinguidas por un subinspector de la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria y un vigilante de seguridad que son vecinos de la zona. El vigilante fue trasladado a un centro médico por inhalación de humos.
Ambos emplearon cuatro extintores y las mangueras de la red extinción de incendios del edificio en el que viven, evitando con ello que el fuego se propagara a otros vehículos y al bajo de la vivienda próxima al lugar donde estaba estacionado el vehículo.
En el lugar del suceso se personaron agentes de la Policía Local de Telde y Policía Nacional, que se hizo cargo de la instrucción del atestado. También hicieron acto de presencia una ambulancia de soporte vital básico del Servicio de Urgencias Canario y bomberos del parque zonal de Telde que se encargaron de enfriar el vehículo calcinado.




























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