La peligrosa vaguedad del socialista Ramos

¿A qué se debe la ambigüedad del portavoz del PSOE en Telde, Alejandro Ramos, con el nuevo pacto, con CC incluida? Esta es la pregunta que se hace la sección El hermano lobo de Canarias7 en su edición de este jueves 13 de octubre. Pero no sólo se la formula el matutino grancanario, también mucha gente en Telde.

Ramos, al que la naturaleza no le ha dotado de una oratoria clara y convincente, juega a la vaguedad un día sí y otro también. En una misma declaración puede decir blanco y negro y se queda tan pancho. El día anterior asegura en Radio Faycán que el PSOE legitima a la alcaldesa para que dé entrada a CC en el pacto y en la jornada siguiente, apenas unas horas después, dejar en el aire sus propias afirmaciones ante los micrófonos de la Cadena Ser.

La imprecisión permanente en la que está instalado el dirigente socialista, que muy poco aprendió de sus más recientes predecesores en el cargo que hoy ostenta en la Agrupación Juan Negrín y en el Ayuntamiento de Telde, tiene desconcertado, no ya a sus socios, medios de comunicación y ciudadanos en general, sino, lo que es peor, a la militancia y simpatizantes del PSOE. Así se entiende la desbandada de afiliados ocurrida en los últimos tiempos en las filas de esta histórica formación política en la ciudad, la más antigua,  y la pobre asistencia de militantes a la asamblea “informativa” de la pasada semana para analizar un asunto tan importante como es la situación del pacto local.

Ramos va de guay por la vida. Se define asimismo como un hombre de diálogo, de talante y franco, pero las tablas políticas que evidencia están muy lejos de una persona que aspira a ser el líder que el PSOE necesita en Telde en una coyuntura tan convulsa para el partido de la rosa y el puño. Su discurso en los medios cansa por confuso y, a la vez,  repetitivo sobre las excelencias de la gestión de su grupo, cuando sabe muy bien, y lo oculta deliberadamente, que mucho se podría hablar de lo que ocurre en áreas como Educación o Desarrollo Local, por sólo citar dos.

Se pregunta también Canarias7 de si acaso esa actitud de Ramos se debe a “larvadas diferencias con la dirección insular que sí asume la entrada de los nacionalistas”. Si así fuera, sería inexplicable que se mantenga en el pacto porque TELDEACTUALIDAD guarda en su audioteca decenas de declaraciones de Ramos en las que sostiene que al grupo municipal que preside nadie le presiona, algo así como que van por libre respecto a los órganos superiores de su partido, al que siempre termina plegándose.

Ramos debe hacérselo mirar porque puede estar echando por tierra las esperanzas que miles de ciudadanos de Telde pusieron en junio de 2015 en la candidatura que él encabezaba. Aún está a tiempo, pero quizás para ello debe hacer menos caso a amistades peligrosas y  un curso acelerado sobre autocrítica y lealtad política e institucional.  Como diría el también concejal Álvaro Monzón, dicho, por supuesto, "con cariño y sin acritud".