Mi familia y yo queremos dar las gracias por el apoyo y cariño recibido por el fallecimiento de mi hija Irina y su padre Juan Gómez.
Ante tan duro golpe ya no sé si este corazón mío quebrado en mil pedazos se podrá componer. Mientras mi hija luchaba por recuperarse de la enfermedad, yo nunca perdí la esperanza, creí en la fuerza de ese sentimiento hasta el último momento.
Fueron muchos y muchas las que se acercaron para mostrar sus condolencias y cada uno me decía palabras que me aportaron tranquilidad, pues en sus creencias sobre la muerte, muchos me manifestaron ese otro plano y dimensión donde se encontraba ahora mi hija y su padre.
La compañía y las palabras en estos momentos son de gran valor y se necesitan. Para todas las personas. partidos políticos, prensa, portal digital, que nos mostraron sus condolencias. Gracias.





















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