Telde llora la pérdida del famoso tallista Manuel Lorenzo, con calle en su memoria en El Goro

Telde llora el fallecimiento del famoso tallista y exfuncionario municipal, Manuel Lorenzo González, a la edad de 78 años, a quien la ciudad dedicó en 2011 una calle en la urbanización industrial de El Goro. Su óbito se produjo este jueves a la edad de 78 años  y su capilla ardiente está instalada en el Tanatorio San Miguel de la capital grancanaria, donde recibirá sepultura este viernes.

Manuel Lorenzo, natural de Vegueta (Las Palmas de Gran Canaria), se jubiló en 2008 como funcionario del Ayuntamiento de Telde, donde vivió la mayor parte del tiempo, aunque en los últimos años fijó su residencia en Valsequillo, donde trabajó en un local de la Casa de la Cultura que le había cedido el Consistorio.

Después de acabar la enseñanza primaria, inició sus estudios en la Escuela de Maestría Industrial, tras los que inclina su afición por la talla de la madera, faceta esta que siempre le atrajo al contemplar desde niño los portones.

Lorenzo comenzó muy joven a trabajar las tallas de madera pero luego se marchó a la Península, donde estuvo jugando al fútbol profesional en el Zaragoza, Huesca y Extremadura. Fue el jugador más caro en el Huesca en el año 63.

Después de dejar la práctica profesional del fútbol,se dedicó en cuerpo y alma a su profesión de tallista, iniciándose en el taller del maestro Pablo Sánchez, en la calle Lepanto de Telde. Allí conoce al célebre artista teldense José Arencibia Gil, con quien traba buena amistad, realizando obras diseñadas por aque, tales como la talla en madera del Altar de la Iglesia de San Gregorio en Telde; el retablo y mesa principal de la Iglesia de San Francisco en Las Palmas de GC; la mesa principal de la Basílica de Nuestra Señora del Pino en Teror y diversas tallas de imágenes.

Tras fallecer el artista José Arencibia Gil, se independiza y monta su taller propio en la calle de Ruiz Muñiz. Realiza entonces sus trabajos de talla en madera, generalmente en muebles, para importantes industriales del gremio como Pablo Sánchez, Francisco Benítez o Ildefonso Jiménez, destacando siempre por su profesionalidad y corrección. Es por esta época cuando realiza el retablo de la Parroquia de Nuestra Señora de las Nieves, en el barrio teldense del Lomo de Magullo.

La Concejalía de Cultura de este Ayuntamiento le contrató para dirigir una Escuela Taller de Talla en Madera, que más tarde pasaría a depender de la delegación de Patrimonio Municipal, donde ejerció su actividad durante algo más de doce años hasta su jubilación.

El escultor realizó varias tallas en madera de figuras religiosas que se encuentran en diversas iglesias de Telde, además de otras obras, como la del salón de Plenos del ayuntamiento de esta ciudad, que hizo cuando trabajaba como empleado municipal. Una de sus obras es el famoso Cristomóvil de la Basílica de San Juan.

TELDEACTUALIDAD se suma al dolor por tan sensible pérdida y traslada su pesar a sus familiares.