Descubren cinco especies cavernícolas inéditas para la Ciencia en el Barranco de Los Cernícalos 

TELDEACTUALIDAD
Telde.- Un proyecto de investigación en el ámbito de la bioespeleología desarrollado en el subsuelo del Barranco de Los Cernícalos, en una vieja y abandonada mina de agua, ha propiciado el descubrimiento de trece especies de invertebrados cavernícolas, cinco de las cuales son nuevas para el mundo de la Ciencia.

Hallazgo único en el Barranco de Los Cernícalos, uno de los enclaves naturales más importantes del municipio y que atesora una mayor biodiversidad. Tras un año de trabajo y ocho prospecciones que se llevaron a cabo en los seis últimos meses de 2017, un proyecto de investigación auspiciado por el escritor, político y activista medioambiental Álvaro Monzón; dirigido por SEC-Melansis y financiado por el Cabildo de Gran Canaria, y que también ha contado con el apoyo del Departamento de Biología Animal, Edafología y Geología de la Universidad de La Laguna y del espeleólogo Octavio Fernández Lorenzo del G.E. Tebexcorade La Palma, ha revelado la presencia de una serie de especies troglobiontes, cinco de ellas desconocidas hasta ahora a nivel mundial.

La revista de espeleología Gota a gota publica en su nº 15 un artículo bajo el título Fauna invertebrada de la Mina de La Federica, riqueza subterránea del Barranco de Los Cernícalos con los resultados de esta campaña de exploraciones cuyos autores son Manuel Naranjo Morales, Sonia Martín de Abreu, Daniel Basilio Suárez Ramos y Octavio Fernández Lorenzo.

Este proyecto, explican sus protagonistas, surgió gracias a la curiosidad del teldense Álvaro Monzón, quién guió a los  bioespeleólogos de la Sociedad Entomológica Canaria Melansis hasta una peculiar mina de agua (conocida como La Federica), situada en el curso bajo del  Barranco de Los Cernícalos, a unos 400 metros de altitud.

Una de las cavidades artificiales de Canarias más ricas en fauna subterránea
Los cinco hallazgos inéditos hasta ahora se refieren a la chinche mantis de Gran Canaria (Collartida sp.n.), un  insecto cazador cuyos parientes más próximos habitan en cuevas de El Hierro y La Palma; a un escarabajo despigmentado del género Pseudoplatyderus; dos gorgojos que se alimentan de raíces (Oromia sp.n. y Laparocerus sp.n.); y una araña roja ciega (Dysdera sp.n.).

Una mala noticia

Lo que también ha resultado novedoso, aunque en sentido negativo, ha sido la localización de la planaria invasora (Caenoplana coerulea), en ecosistemas subterráneos; un predador generalista que puede estar afectando a la fauna cavernícola del lugar.

Con cerca de un kilómetro de recorrido y en un área poco antropizada del Paisaje Protegido de Lomo Magullo, la Mina de La Federica es una de las cavidades artificiales de Canarias de mayor biodiversidad, además de una excavación de gran singularidad.

Un lugar peligroso si no se es experto en espeleología 
Su trazado se desarrolla en el medio subterráneo superficial (MSS) y profundo (MSP), de lavas recientes y sedimentos aluviales. Y la presencia de gases no hace aconsejable su visita sin contar con el personal e instrumental adecuado. 

Algunos de los tramos de esta mina de agua se asemejan a un tubo volcánico ya que una colada volcánica reciente hace las veces de techo.  Este fenómeno hace que parte de la gruta sea similar al de una cueva natural, en la que se pueden observar almagres o moldes de árboles que fueron arrastrados por la erupción y restos de vegetación carbonizada.