El Cristo de Telde vuelve a las calles del casco histórico con los feligreses con el "corazón encogido"

Telde procesionó esta noche de forma solemne, en el día gran de las fiestas religiosas en su honor del Santo Cristo de Telde, a la venerada imagen, en el que ha sido el primer desfile desde 2019 tras declararse la pandemia de coronavirus.

Los cientos de fieles que le acompañaron lo hicieron con el “corazón encogido” como le cantó Iván Quintana, miembro de Los Gofiones, en la sentida malagueña al paso de la efigie por delante de las Oficinas Municipales.

El trono de la bella talla modelada en la primera mitad del siglo XVI asomaba por la puerta principal de la Basílica a filo de las 20.25 horas, casi 90 minutos después de la misma oficiada por el reverendo Juan Santiago Quintana Quintana, párroco de La Pardilla, con el acompañamiento del cura titular de San Juan, José María Cabrera, y de otros sacerdote del arciprestazgo de Telde.

Como es tradicional, a las puertas del templo esperaban al trono del Cristo, bellamente engalanado por un llamativo arreglo floral hecho por Segundo Amador , una representación de las autoridades locales encabezada por la alcaldesa Carmen Hernández y la Banda Municipal de Música, que acompañó también todo el recorrido del cortejo procesional.

El periplo por el conjunto histórico-artístico de San Juan discurrió con fervor y devoción por las calles de Plaza de San Juan, Juan Carlos I, Conde de la Vega Grande, Duende, Plazoleta Marín y Cubas, Doramas, Los Sabandeños, Julián Torón, León y Castillo y de nuevo paso por la Plaza de San Juan. En la de Conde de la Vega Grande, a la altura de la fachada trasera de El Casino de Telde, se tuvo que bajar el trono debido a que la cruz rozaba con un cable que cruza esta vía.

Hubo dos  paradas  para que la imagen recibiera los cánticos desde el balcón de viviendas a cargo de solistas.

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