La victoria sin paliativos del pp de Juan Manuel Moreno en Andalucía pone en la mesa, esta vez sí, una tendencia evidente, que va a beneficiar, sin curro alguno, a Feijóo. El triunfo de Moreno es el de la moderación. Se carga de un plumazo la intención de Vox de ser gobierno, y recibe voto de casi todos, pero fundamentalmente de Ciudadanos que desaparece.
El diagnóstico es muy sencillo, nadie lo duda. La izquierda dividida, eso el sistema lo castiga, además de dejar a muchos en la abstención, la moderación del candidato Moreno y por supuesto el rebufo de la política del gobierno central, con las consecuencias de la guerra en Ucrania y debates internos del gobierno, pero esto último algo menos. Yolanda Díaz con sus amagos continuos para consolidar su proyecto, y el propio Sánchez tienen que mover ficha sino quieren que el cambio también sea claro en un año. La gente vota especialmente por la economía y ahora las cosas no son fáciles.
Para los que crean que los datos andaluces se pueden trasladar a Canarias, se equivocan. Canarias tiene un presidente socialista, Ángel Víctor Torres, que por los estudios demoscópicos está reconocido por los canarios, segundo; aquí tenemos dos partidos nacionalistas fuertes, CC y NC, que no tiene Andalucía, y ese no es un asunto menor. Tercero, un pp muy tocado, y que tiene que mostrar nuevos liderazgos poco conocidos, otra cosa, es que está muy claro que los conservadores crecerán aquí en las islas también, pero ni de lejos lo que ha ocurrido en Andalucía.
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