La Policía Local cerró de manera definitiva este jueves el terreno privado que se ubica tras las casas del barrio de Hoya del Pozo para evitar que los usuarios acampen con sus caravanas en una zona no permitida para esta actividad.
El Consistorio cumplió con el plazo notificado hacía justo una semana a los campistas para que sacasen de la parcela sus vehículos antes del cerramiento, tras la denuncia vecinal publicada por TELDEACTUALIDAD.
El martes la administración mostró que la cosa iba en serio y tapó parcialmente la entrada al terreno elevando montículos de tierra con una excavadora, dejando una única entrada y salida. Hasta este jueves cuando, a primera hora, los operarios municipales terminaron de cercar el lugar con dos muros de hormigón, según publica Canarias7.
Tras una semana de plazo, decenas de campistas sacaron sus viviendas a motor del solar. Unos porque entendieron la situación y no les importaba salir a buscar otro espacio habilitado y otros, en desacuerdo con el Ayuntamiento, porque quisieron huir de problemas.
Un pequeño grupo de cinco ciudadanos que dicen «no tener nada mejor que esto para vivir» se han quedado dentro de la superficie propiedad de una inmobiliaria. A ellos la policía, por ahora, no les ha puesto ningún inconveniente para quedarse. Según los titulares de las autocaravanas, se les ha permitido quedarse aquí hasta encontrar una solución para mejorar su situación y un lugar a donde poder ir. Una labor que queda ahora en manos de cada ciudadano y de asuntos sociales.
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