TELDEACTUALIDAD
Telde.- Los vecinos del barrio de San Juan conviven desde hace meses con un nuevo vecino muy dado a la algarabía en horas intempestivas. Un gallo que ahora habita en el parque urbano y que al canto del quiquiriquí perturba el descanso del vecindario.
Un día tras otro, desde las 5 de la mañana y hasta horas del mediodía, este gallo solista mantiene en vilo a buena parte de las familias sanjuaneras que residen en los bloques de viviendas aledañas del parque urbano.
“¿No cree nuestro concejal de Parques y Jardines que el señor gallo estaría mejor en la Finca del Viso, por ejemplo?”, comenta un molesto vecino de la calle Aguañac que urge a los responsables municipales a trasladar al animal a otra ubicación y que incide en que en el barrio ya se registran suficientes ruidos procedentes del tráfico, del camión de la basura o las tapas de alcantarillas mal encajadas y que resuenan cada vez que las pisa un vehículo.
“Hay vecinos que trabajan de noche y tienen que descansar por la mañana, y otros que terminan de trabajar tarde y necesitan descansar hasta por la mañana”, concluye este afectado.
























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