La Pardilla celebra su Carnaval Tradicional

TELDEACTUALIDAD
Telde.- El barrio teldense de La Pardilla vivirá este viernes el Carnaval a la manera más tradicional, con una Vaca del Carnaval (19.30 horas) y un baile de piñata (21.00 horas).

La celebración está organizada por la la Escuela Taller Tyldet y contará con la participación de la Parranda El Cerrillal y el colectivo Maicá.

Recuperando las tradiciones canarias
A partir de los años 60 del siglo XX, las tradiciones del campo, las de nuestros padres y abuelos, se han convertido en material de estudio para las Ciencias Sociales. El retroceso del sistema de producción y de trabajo, el abandono de lo rural por lo urbano, el éxodo masivo hacia las zonas urbanas, el desarrollismo, el excesivo consumo y el cambio de modelo económico para formar parte de una sociedad globalizada y desnaturalizada, lleva consigo el abandono de formas de celebración muy antiguas. 

Nuestro carnaval hunde sus raíces en la antigüedad; fruto de esta aseveración son las manifestaciones que tienen que ver con la representación de animales mitológicos durante el periodo anterior a la Cuaresma. De estas manifestaciones ya solo quedan reductos muy significativos en nuestro archipiélago que la sociedad canaria, en general, desconoce. 

Un caso particular es La Vaca del Carnaval de La Pardilla, que tiene su réplica en la localidad de Tinajo en la isla de Lanzarote; se trata de una persona vestida con zaleas de carnero y cuernos de vaca que recorría los lugares y asustaba a los viandantes. Esta manifestación festiva es similar a los Carneros de Tigaday o los Diabletes de Teguise. Aún queda mucho por investigar y por poner en valor de nuestra cultura tradicional canaria. 

El carnaval tradicional es rico en matices y propuestas. Conviene resaltar “dar la quintada”, que no es otra cosa que cubrirse la cara con una careta, trapo o talega y a la voz de “¿me conoces mascarita?” 

Intentar burlar a toda persona que le salga al paso; los ranchos de máscaras, que son la unión de muchas mascaritas, y que al sonar de guitarras y otros instrumentos recorrían los espacios comunitarios y privados. 

Quisiéramos destacar las diferentes maneras de celebrar el carnaval, que forma parte de las fiestas del solsticio de invierno y que antiguamente ocupaban un espacio de tiempo mayor que el actual. Estas fiestas no solo eran para “vestirse de máscaras”, llevaban asociadas toda una cultura culinaria, hoy en franco retro- ceso, pues las tortillas de carnaval hechas con gofio, harina o queso prácticamente han desaparecido de nuestra celebración, dando paso al exceso de alcohol y otras sustancias. 

Los Bailes de Piñata, al igual que los jueves de compadres y comadres, han desaparecido, aunque quedan algunos lugares de nuestro archipiélago donde acontece esta celebración; La Pardilla es uno de ellos, debemos y tenemos la obligación de mantenerlo vivo. 

Nuestra cultura popular debe permanecer al margen de la “Cultura oficial” y dominante. Es necesario reivindicar la diversidad cultural y nuestro carnaval tradicional es una de esas manifestaciones que debemos cuidar, apoyar y di- fundir para que no caiga en el olvido, explican los organizadores.