Telde activa un dispositivo especial de vigilancia nocturna tras la ola de incendios

Telde.- Telde contará a partir de esta noche con un dispositivo especial de vigilancia nocturna que pondrán en marcha los cuerpos de seguridad del municipio ante la oleada de incendios que tuvieron lugar en la madrugada de este jueves en el Valle de Jinámar. El suceso dejó 22 contenedores y dos vehículos quemados.

 

Esta decisión la han tomado esta mañana durante una reunión convocada por la alcaldesa de Telde, Mari Carmen Castellano. Tal y como adelantó TELDEACTUALIDAD, la primera regidora había citado a las 12.30 horas al comisario del Cuerpo Nacional de Policía en Telde, además de al jefe de la Policía Local, Antonio Mederos; y al concejal de Seguridad, Héctor Suárez. También estuvo presente el jefe de la brigada de Seguridad Ciudadana.

 

El dispositivo normal que se realiza en horario nocturno en Jinámar es de dos patrullas de la Policía Local de Telde, una de agentes de Las Palmas de Gran Canaria y otra de la Policía Nacional. Ahora se verá reforzado.

 

La alcaldesa aclaró que este tipo de actos vandálicos es considerado un delito, teniendo en cuenta que al quemarse 22 contenedores el valor del daño causado asciende a 25.000 euros, además de los dos vehículos siniestrados. Este tipo de acción conlleva penas privativas de libertad.

 

La primera regidora destacó la colaboración total que existe en estos momentos con todos los cuerpos de seguridad, tanto municipales como del Estado, para perseguir este tipo de acción delictiva hasta encontrar a los culpables de realizarlas. Cabe destacar que durante la madrugada también intervinieron policías locales de Las Palmas de Gran Canaria ya que tienen la demarcación compartida.

 

Dentro del marco de la investigación, también se ha solicitado a los bomberos del Consorcio de Emergencia de Gran Canaria, que tuvieron que intervenir en varias ocasiones durante la madrugada, un informe para conocer la metodología empleada por los causantes de los fuegos. Por otro lado se están visionando imágenes captadas por diferentes cámaras en la zona.

 

La cifra de contenedores quemados en el municipio no deja de crecer. En lo que va de año, sólo tres meses, ya han ardido 44 que ascienden a un valor de 50.000 euros. En 2013 la cifra total fue de 91. Cada contenedor tiene un precio de 1.100 euros.

 

Entre 2.15 y las 5.45 horas de este jueves, dos pirómanos, según los primeros datos, mantuvieron en jaque a agentes de la Policía Nacional y Local y a efectivos de bomberos que se desplazaron al Valle de Jinámar al ser alertados por los vecinos de la quema indiscriminada de depósitos destinados en la vía pública a la recogida de residuos orgánicos, botellas y papel.  

 

Los siniestros se fueron sucediendo en puntos de las calles de Fernando Sagaseta, Manuel Alemán Álamo y en Lomo Las Brujas durante más de tres horas, afectando a más de una veintena de recipientes, 18 de ellos de 2.400 litros de capacidad ya repuestos por los servicios municipales, que quedaron totalmente o parcialmente destrozados por las llamas provocadas. Fueron vecinos de la zona, alertados por las explosiones de la combustión, los que avisaron a los servicios de seguridad y emergencias.

 

El siniestro provocó daños también a dos contenedores metálicos para la recogida de papel y cartón (gestionados por Martínez Cano) y a dos iglús verdes para el depósito de vidrio. En total, 22 recipientes deteriorados por los incendios, a tenor de los datos suministrados a este periódico por Héctor Suárez, concejal de Recogida de Residuos y Limpieza Viaria.

 

La empresa Plastic Omnium, con sede en Telde, ha repuesto 18 de los recipientes ya que los correspondientes a vidrio, 4 de ellos, tiene que realizarlo el Cabildo de Gran Canaria.

 

Según la adjudicación del Ayuntamiento de Telde en relación a la recogida de basura, existe un 10% de reposición por la quema de contenedores que se hace cargo la empresa concesionaria. Sin embargo, el cupo ya se ha superado con apenas tres meses de lo que va de año. Por ello, será el Consistorio y por ende todos los ciudadanos los responsables de pagar el coste del material quemado.