MAYTE OJEDA
Se me grabaron algunas de las palabras que Carmen Hernández dijo en el Pleno de su toma de posesión: “Trabajar para conseguir otro modelo de sociedad y otro tipo de política que lo haga posible”, de verdad que me gustaron y pensé que nacía un nuevo gobierno con ilusión, sin rencillas y enterrando el hacha de guerra.
A nadie se le esconde la grave situación por la que atraviesan las empresas municipales del M. I. Ayuntamiento de Telde, muchos han sido los días que se han manifestado y que en que en varios medios se hicieron eco de la situación de impagos de salarios. Hasta ahí nada nuevo. Si decir que me parece injusto y desconsiderado que siendo empresas del propio Ayuntamiento exista este agravio comparativo a la hora del personal recibir sus honorarios.
Yo en este caso quiero hacer público lo ocurrido este lunes en la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo de Telde, Fomentas, donde se despide a una trabajadora de una forma que deja mucho que desear…
Fomentas, como muchos sabemos está inmersa en un Concurso de Acreedores en el que el convenio firmado se ha ido cumpliendo con mucho esfuerzo y contratiempos en los últimos cuatro años. No es nuevo que sus trabajadores llevan un largo periodo de tiempo no percibiendo sus salarios en tiempo y forma, por tanto, algunos han optado por denunciar esta situación y pedir la extinción de su contrato por incumplimiento del mismo.
No es el caso de esta trabajadora, que el lunes 10 de agosto a las dos y diez de la tarde recibe la noticia de que en ese mismo momento y sin previo aviso (15 días estipulados), está despedida. ¡No olvidemos que estamos hablando de personas y no de expedientes, ni de números!, me parece una acción surrealista ya que durante el mes de agosto los juzgados y los abogados brillan por su ausencia, ¡todo premeditado!
En este momento se le adeuda a la trabajadora la paga extra del mes de junio, el mes de julio, no ha disfrutado de su periodo vacacional, por tanto, también se le adeuda, los diez días de agosto y los quince días de preaviso. Pero menuda sorpresa la que me he llevado cuando siendo conocedora de la grave situación por la que atraviesa la empresa, se contrata para su despido uno de los mejores despachos de abogados de Gran Canaria.
Y yo me pregunto: ¿cómo es posible que una empresa que debe a día de hoy el salario de julio a sus trabajadores, además de la paga extra de junio de algunos compañeros que no la tienen prorrateada en su sueldo, y tiene una deuda bastante considerada, se puede permitir el lujo de contratar a uno de los mejores despachos de abogados de la isla?
No todo queda aquí, porque lo que más me indigna sin ser las formas, es que se despida a una trabajadora sin estar al día en sus abonos salariales, además de la casualidad de que sea el único despido y que esta persona tenga una ideología política diferente a la que es la presidenta de la empresa y actual alcaldesa de Telde, Carmen Hernández.
¿Cuándo va a acabar este tipo de políticas?, y el “quítate tú para ponerme yo”. Mi repulsa ante estos hechos es porque Carmen Hernández, presidenta de la empresa no le ha dado la oportunidad ni siquiera de conocerla, no sólo como persona sino sobre todo como profesional.
Escribo esto no porque sea mi amiga, porque me consta que es una gran profesional con dos carreras aprobadas con esfuerzo y con un don de gente que ya le gustaría a muchos. Por eso como pueden entender, no podía quedarme con los brazos cruzados cuando se siguen cometiendo en este Ayuntamiento injusticia relacionadas con lo político, cuando lo político debería de ser lo correcto.
Y termino este artículo aludiendo al ensayista estadounidense Elbert Hubdard: “Una máquina puede hacer el trabajo de 50 hombres corrientes. Pero no existe ninguna máquina que pueda hacer el trabajo de un hombre extraordinario”.
Mayte Ojeda León es ciudadana de Telde, fue asesora del Ayuntamiento durante el anterior Gobierno municipal y es militante del PP.























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