Avance: La Justicia archiva la querella de la alcaldesa de Telde contra dos ediles de la oposición

Telde.- El Juzgado de Instrucción número 2 de Telde ha dictado un auto por el que ordena el archivo de la querella presentada a principios del pasado año 2013 por la actual alcaldesa Mari Carmen Castellano contra los ediles de la oposición Francisco Santiago y Héctor Suárez por injurias y calumnias, según ha podido saber TELDEACTUALIDAD, al considerar que no existe delito alguno en las manifestaciones de los concejales.

 

Según refleja la magistrada Virginia Peña, en un auto fechado este martes 21 de enero de 2014, no se aprecia indicio alguno que justifique debidamente la perpetración de un delito de injurias y calumnias, tal y como alegaba el abogado Daniel Reyes en representación de la alcaldesa Castellano, ni “mucho menos” de chantaje.

 

Además, la jueza sostiene que el contenido de dichas manifestaciones pertenecen, sin perjuicio de la primacía de la libertad de expresión, al ámbito de la crítica política. Y en ellas no aprecia “clara intención” de atentar contra la dignidad de la persona, sino que se critica una decisión política.

 

La instructora da carpetazo al caso -se puede recurrir en reforma y en apelación- en tres folios explicando que la circunstancia de que los ediles de Nueva Canarias calificaran de "chantaje" la actuación de la alcaldesa "no constituye hechos delictivos concretos", como señaló el Ministerio Fscal en su informe de 12 de noviembre de 2013, y que la conducta "excede de los límites del derecho penal", por lo que la parte querellante puede recurrir a la vía civil si considera que se ha quebrantado el derecho al honor.

 

Cabe reseñarese que tanto la defensa de Francisco Santiago como de Hector Suárez ha corrido a cargo del reconocido letrado José María Guerra Aguiar, con despacho en Telde

 

Castellano interpuso la querella por unas las declaraciones públicas de Santiago y Suárez en las que se le acusaba de “falta de escrúpulos” y de "cacicadas” por unas supuestas presiones ejercidas para lograr el despido del entonces edil nacionalista Suárez, hoy integrante del grupo de los no adscritos, de la empresa Ralons.

  

Nueva Canarias de Telde consideró en su momento que la querella por calumnias e injurias de la primera regidora era una “cortina de humo que se le vendrá en contra”. Según el grupo de la oposición, Castellano se metió en otro “fregado” y, a posteriori, se “saca de la manga otra cortina de humo que se le vendrá en su contra".

 

Así, los nacionalistas denunciaron, en una rueda de prensa celebrada el 21 de mayo de 2012, que por "presiones" de la alcaldesa de Telde el entonces concejal de su grupo, Héctor Suárez, fue despedido de la empresa en la que trabajaba, Ralons. Entidad a la que el Ayuntamiento había adjudicado recientemente la limpieza de varios colegios del municipio.

 

NC formuló esta denuncia en una conferencia informativa en la que estuvieron presentes el líder del partido en Telde, Francisco Santiago, los concejales Josefa Milán y el afectado, Héctor Suárez, así como el exedil Agustín Arencibia, celebrada en la sede de la calle de Reyes Católicos.

 

El despido del edil nacionalista se materializó el 7 mayo del citado año, después de que Suárez se negara a aceptar la imposición de la empresa de acudir urgentemente a Tenerife para que "no estuviese presente en una sesión plenaria". Francisco Santiago reprochó  en la reunión informativa con duros calificativos el comportamiento de la alcaldesa Mari Carmen Castellano y el de la compañía Ralons por aceptar el “chantaje” y las “presiones” de la primera regidora local.

 

Entonces, Francisco Santiago apuntó que el despido de Suárez constituía una “agresión en toda regla” a su organización política, de la que el joven concejal era por entonces uno de sus “principales activos”.

 

Relató el exalcalde que el que fuera concejal de Deportes durante el mandato 2007-2011, licenciado en Ciencias del Deporte, fue seleccionado para trabajar en Ralons por su currículo y se le asignó un puesto de responsabilidad como encargado de Recursos Humanos.

 

“No había pasado un mes y el dueño de Ralons comienza a recibir presiones de la alcaldesa para que sea despido”, usándose en primer lugar el nombre de la concejala de Deportes, Migdalia Rodríguez. “Es la primera mentira de la alcaldesa porque Migdalia dejó claro que no tenía nada que ver” con estos “chantajes” y se ofreció incluso a aclarar la situación.

 

Además, Santiago subrayó que las presiones continuaron tras la dimisión de Migdalia Rodríguez como concejala del Ayuntamiento de Telde.

 

Puso de relieve que “a lo largo de este tiempo se ejerce todo tipo de presiones y se usan todo tipo de estrategias y palancas para que Héctor dimita, hasta el punto de mandarle el mismo día de un pleno a darle de alta a trabajadores de la empresa en distintos puntos de la Isla para que no asistiera al pleno, el único al que ha faltado”.

 

Santiago abundó en que la alcaldesa gestionó una reunión con Héctor y en el último pleno que se celebró un viernes recibió la tarde anterior la comunicación de la empresa de que debía desplazarse a Tenerife a resolver asuntos de Recursos Humanos, a pesar de que estaba convocado como edil a la sesión plenaria.

 

“A pesar de que es un derecho constitucional como concejal, se le advierte de que si no va a Tenerife tendría repercusiones y como decide ir al Pleno el lunes siguiente, después de recibir llamadas del vicepresidente y presidente de la empresa, Miguel Ángel Ramírez, instándole a no acudir, se le entrega una carta de despido disciplinario”.

 

Para el exprimer edil, las presiones ejercidas por la alcaldesa representan “muy bien el bajo estilo y la bajeza de hacer política del grupo de Gobierno y lo que es su principal virtud: hacer daño y ocasionar sufrimiento a otras personas”.

 

El líder de NC, que llevó la voz cantante en aquella rueda de prensa, arremetió también contra la empresa Ralons y su presidente Miguel Ángel Ramírez, “que es capaz de aceptar este tipo de chantaje, lo que demuestra claramente la calidad y el rigor de empresarios que se dejan chantajear por intereses políticos”. En su opinión, este comportamiento empresarial crea “precedente” para que se soporte “chantajes de otras administraciones”.

 

Héctor Suárez, por su parte, lamentó que “las pocas oportunidades de trabajo para los jóvenes se ven truncadas de esta forma”, calificó de “palo personal” la situación en la que se ha visto inmerso por su condición de concejal de la oposición y dejó claro que un objetivo era combinar la actividad política con el ejercicio de la actividad privada, cuestión que dejó clara a la alcaldesa y al portavoz del PP, Francisco López, en la reunión que mantuvo con ellos antes de su despido.

 

Santiago señaló por último que su organización aconsejó entonces a Suárez que no recurra el despido, “aunque lo tiene ganado por vulnerarse un derecho constitucional”, porque estaría sometido a un “sobresalto permanente” y porque, a juicio de NC, “esa empresa no es digna de tener trabajadores serios como Héctor Suárez”.