La mano que mece la cuna

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Telde.- La mano que mece la cuna. El concejal socialista Gregorio Viera recurrió al título de un conocido film de para encabezar su nueva reflexión en la columna Con la pluma del Faycán. De fondo, las recientes primarias celebradas por el PSOE grancanario para elegir a su nuevo secretario general.

Con La pluma del Faycán

La mano que mece la cuna

No les voy a aburrir con el relato de esta extraordinaria película de Curtis Hanson que narra la historia de una servicial y bondadosa niñera. Su trato es excelente y pronto se gana la confianza de la familia, pero en su interior esconde un oscuro propósito y ahora me sirve como introducción a lo que ocurre muchas veces en la política, sus idas y venidas.

Los oscuros propósitos que personajes de la vida política o retirada de ella, que alargan su sombra para seguir meciendo unos oscuros deseos que los pone al servicio de su interés y de quienes le arropan para poner o quitar voluntades.

Personajes que tienen como libro de cabecera al autor de ‘El príncipe’, Nicolás Maquiavelo que según algunos autores dedicó su vida a tratar de advertir a la gente sobre los peligros que amenazaban sus libertades y sus reflexiones sobre desigualdad y abuso de poder tienen plena vigencia hoy día y para otros, un libro que consideran un auténtico manual para tiranos, conspiradores, usurpadores de lo público y de las voluntades individuales y es ahí, donde sus discípulos más avezados tiran de manual.

En los procesos internos de los partidos políticos, al igual que en otras organizaciones, tenemos claros ejemplos de maquiavelismo, - modo de proceder que se caracteriza por la astucia, hipocresía y perfidia para conseguir lo que se desea-, se lanzan mensajes de descalificación a quien o quienes no respalden una iniciativa u otra, gruesas palabras que se manejan en las redes, que quedan ahí grabadas para sonrojo de quienes lo escriben y luego corren a borrarlo, sin saber, o si, que lo que en la red se pone, en la red se queda.

Estos personajes que mecen la cuna, que no dan la cara, se esconden, esconden sus verdaderas intenciones manipulando los hechos, manipulando las palabras, torciendo en muchas ocasiones la buena voluntad de quienes se prestan a sus juegos con el convencimiento de que lo hacen por el interés general, el interés grupal, cual lejos de la realidad.

Se llenan de argumentos, invalidan a otros lo que para si mismos les invalidaría, encienden los ánimos con el único propósito de agitar la situación, crean falsas realidades e inciertas informaciones que intoxican y poco a poco van colocando en boca de quienes a pies juntillas creen en el proceder de quienes mecen la cuna.

Los procesos de primarias que debieran ser un acto de expresión libre de la voluntad personal se transforma en un “está conmigo o contra mi”, sin entender que la libre elección de una candidatura no invalida la otra, por el contrario, enriquece el proyecto, porque se trata de eso, del proyecto que nos representa a todas y todos, se trata pues a nivel personal, ser el instrumento para abordarlo con garantías, solvencia, capacidad y sobre todo con generosidad.

Tengo claro cual es mi compromiso, donde está y hasta donde llega, sin más vueltas. No me preocupa - nunca me ha preocupado - estar en la primera línea de la política. Eso no quita para que no distinga la paja del trigo, quien mece la cuna para su propio beneficio, para desear que el proyecto tenga a los y las mejores para construir, sin revanchismo y sin porcentajes, la Gran Canaria que la ciudadanía necesita y demanda.

Toda pérdida tiene su tiempo de duelo, pero ahora no hay pérdida, por tanto no hay duelo, hay que seguir caminando con ideas, con propuestas, para crecer en un escenario algo complicado.

Un escenario donde el presupuesto municipal no ayuda a paliar, ni siquiera a mitigar la exclusión social, pero tampoco ayuda los voceros, estos otros, que también mecen la cuna e incendian las redes soliviantando - por el derecho individual a la asistencia-, olvidando el derecho de trabajadoras y trabajadores a que se les respete, máxime cuando actúan en representación de una institución como lo es el ayuntamiento, mal vamos si dirigimos los tiros a quienes en estas circunstancias cumplen con su deber.

En Telde sabemos de ello y por eso, debemos impedir que nos mezan la cuna, si hay algo importante en todo esto, debe ser nuestro compromiso con la ciudad…

Con la pluma del Faycán.

Gregorio Viera Vega es concejal de la oposición en el Ayuntamiento de Telde por el PSOE.